Jubilaciones y AUH pierden el 3,85% de poder adquisitivo real

En base al nuevo índice de movilidad que se aplica por tercera vez este año, el Gobierno determinó que a partir del primero de septiembre, las jubilaciones, pensiones y la AUH aumentarán 6,68%. Sin embargo, expertos previsionalistas estiman que si la inflación anual cierra por arriba del 35%, como proyectan las consultoras privadas, los titulares de este derecho perderán hasta 8% de poder adquisitivo real.

La jubilación mínima actual es de $ 8.096,30 y la máxima, de $ 59.314,97. Con el nuevo ajuste pasarán a $ 8.637,10 y $ 63.277,20, respectivamente. La AUH, que beneficia a unos 4,3 millones de niños y adolescentes de todo el país, subirá apenas $ 105, de $ 1.578 a $ 1.683 por mes.

El porcentaje de aumento se determina en un 70% por las variaciones del Nivel General del Índice de Precios al Consumidor Nacional elaborado por el INDEC y en un 30% por el coeficiente que surja de la variación de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE).

Con el próximo 6,68% al que se llegó por las cifras de abril, mayo y junio de 2018 (segundo trimestre), el haber jubilatorio se habrá ajustado en total un 19,19% en nueve meses. Al sumar porcentajes acumulativos se deben pasar las cifras a decimales, sumarles la base 1 (1,0571; 1,0569; 1,0668), multiplicarlas, luego restarle 1 y multiplicarlas por 100. Pura matemática financiera.

Si se toman los últimos 12 meses desde junio para atrás, la suba de precios totalizó 29,5%. Pero desde octubre de 2017 a junio 2018 el costo de vida aumento 23,04%, con lo cual los abuelos perdieron 3,85% de poder de compra real en ese mismo período. Por este motivo, en marzo se dio un bono compensatorio por única vez de entre $ 375 y $ 750, según el caso, y de $ 400 los que perciben la AUH.

Aunque se tome ese bono, la pérdida existe igual: con la fórmula vieja en marzo pasado la suba debió ser del 14,5% (y no 11,73%) y, encima, tres meses antes.

VIAAmbito