En la reciente reunión de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) el CEO del grupo Clarín, Héctor Magnetto, fue entrevistado. Y habló de tendencias de negocios.
—¿Hacia dónde va el grupo?¿Se reorienta hacia las nuevas tecnologías?
—No sé si algo le dice que mi oficina y la de mis socios siguen estando en la sede del diario. Los medios son nuestra esencia. En los últimos años hemos invertido mucho en contenidos y en tecnología, tanto en el diario como en el canal y en la radio. Y sobre todo en cómo llevarlos a las nuevas plataformas de manera sustentable. Tenemos allí incluso mucha más audiencia que en los medios tradicionales.
El empresario recordó que el primer paso del grupo fue dar el servicio de TV por cable. “Eso evolucionó con la masificación de Internet. Y luego se le sumó la movilidad. Para nosotros fue un paso natural”.
• “La conectividad es uno de los factores que más contribuyen a la competitividad de un país.
Magnetto destacó que “la banda ancha no sólo es un insumo crítico para los negocios digitales. Es esencial para los servicios, el comercio, las finanzas, el turismo. También para la industria: la tecnología y la conectividad que requieren hoy los sectores primarios están fuera de discusión. Desde el monitoreo del clima en los cultivos hasta el análisis en tiempo real de los yacimientos. Lo mismo sucede con las manufacturas: la robótica y el modelo industrial 4.0 son hoy moneda corriente. Al igual que la inteligencia artificial y el big data”.
Hacia el futuro señaló que “la movilidad sigue expandiéndose. Con un peso creciente del streaming y los nuevos consumos derivados de la Internet de las Cosas”.
Por este motivo, se requiere “una ampliación exponencial de la capacidad y velocidad de transmisión de datos. La inversión en este plano tiene la urgencia y el volumen de otras, como la energética o la logística. En los últimos 20 años, la inversión en telecomunicaciones ha estado por debajo de lo que requiere el desarrollo económico del país”.
• Argentina tiene una penetración de banda ancha fija del 60% de los hogares y una velocidad promedio de 19 megas.
Como referencia mencionó que el promedio de la República Checa es de 40 megas; el de Polonia, 47, y el de Nueva Zelanda, 76.
“En banda ancha móvil, las desigualdades territoriales y de velocidad exigen aceleración del despliegue de antenas y disponibilidad de espectro. Todo esto requiere de fuertes decisiones de inversión. Y a su vez se necesita escala, que puede derivarse de la dimensión global de las empresas o bien de su consolidación local. Esta fue la lógica de la fusión de Telecom y Cablevisión.
Sigue la misma línea que se está transitando en el mundo. Y nos permite estar ejecutando hoy un programa de US$5.000 millones de inversión que de otro modo no hubiera sido posible. Es lo que hace falta para ir hacia una red fijo-móvil que permita brindar cuádruple play, que es lo que demandan los consumidores y las empresas”.