Quienes estaban pensando en comprar un 0 km, entregando su auto usado en parte de pago, están en problemas. El salto del dólar que se produjo a partir de fines de abril -y que todavía no parece haber alcanzado su techo- alteró la relación de precios entre unos y otros.
Por la devaluación, los valores de los vehículos nuevos se dispararon, debido a la incidencia que tiene el tipo de cambio en este sector, mientras que los de segunda mano no acompañaron esa estampida, provocando que la brecha entre ambos se ampliara de manera inesperada.
- Según datos del mercado, un vehículo modelo 2017 perdió casi 40% de su valor en relación a lo que cuesta su 0 km equivalente.
«La brecha entre un vehículo de un año de antigüedad respecto al nuevo es, en épocas normales, de entre 10% y 20%, según los kilómetros que tenga y su estado. Hoy es más del doble, lo que muestra que estamos viviendo un momento atípico. Estamos realmente sorprendidos por lo que está pasando en el mercado» señaló Alberto Príncipe, presidente de la Cámara del Comercio Automotor.
Esto se produce con un vehículo en su primer año de vida pero empuja a los modelos anteriores que sufren una depreciación de alrededor de 10% por cada año adicional. Es cierto que la comparación se realiza contra los precios de listas pero, en realidad, la mayoría de los modelos tienen fuertes bonificaciones.
Los 0 km aumentaron en lo que va del año alrededor de 45%, aunque la mayor parte de ese incremento se produjo de forma brusca desde fines de abril. Los usados no tuvieron un incremento similar.