Un informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda señala que la República Argentina es el segundo país en América del Sur con mayor costo de los combustibles al consumidor final, con un precio de US$ 1,23 el litro de nafta. Detrás se ubican Chile, Brasil, Perú, Paraguay, Colombia, Bolivia, Ecuador y Venezuela. Sólo es superado por Uruguay.
Además, el poder adquisitivo de sus ciudadanos en relación al combustible continúa en baja: se redujo hasta un 25% desde hace dos años y medio.
De acuerdo con el informe, con un salario mínimo se podían adquirir 381 litros a fines de 2015, mientras que en el presente se compran sólo 283 litros, lo que supone una baja de 25,7%.
«El precio del combustible en la Argentina continúa aumentando por encima de la inflación general a partir de diferentes medidas que ha tomado el Ejecutivo que sirvieron para desregular los precios internos y anexar la evolución del valor del combustible a los precios de referencia de mercados externos», indica el informe.
Comparando valores en dólares, el precio en la Argentina está por encima de los promedios en África, Asia y América, y sólo está por debajo de la región europea.