Luz roja: Por las tasas altas, baja la recaudación de impuestos

El titular de la AFIP, Leandro Cuccioli

La AFIP descubrió que está siendo uno más de los damnificados por la elevada tasa de interés que impone la política monetaria restrictiva del Banco Central: las pymes que tienen un régimen especial por el cual pueden postergar el pago de impuestos por una “ventana” de 60 días, lo están usando al máximo.

Las cuentas son claras, y las hacen todos las empresas que deben algún impuesto: la tasa que cobra la AFIP por demorar los pagos es de 3% mensual y en los bancos les cobran más del doble. Financiarse con la AFIP pasa a ser ventajoso en una situación de extrema dureza financiera en la que la postergación de obligaciones pasó a ser moneda corriente en la cadena de pagos.

Este «estrés» en la cadena de pagos va en ascenso y, junto con el atraso salarial y ahora el retroceso del dólar, son las principales anclas que tiene el Gobierno para combatir a la inflación que esta semana será noticia cuando se difunda el índice de septiembre (¿5%?).

Pero la baja en la recaudación impositiva aumenta el déficit fiscal, una señal de alarma para el F.M.I. y los otros acreedores de la Argentina: así disminuyen los recursos que tiene el Gobierno para pagar sus deudas.

VIAClarín