Ahora, que el escrutinio provisorio indica que Jair Bolsonaro será el próximo Presidente del Brasil, es apropiado reproducir aquí los puntos fundamentales de su plataforma en Economía y Empleo. Es cierto que los argentinos sabemos que las plataformas electorales y las políticas de gobierno son cosas muy distintas. Pero muestran lo que una mayoría de la población brasileña aprueba o al menos acepta.
- Dejar atrás el comunismo y el socialismo y practicar el libre mercado.
- Establecer un impuesto único sobre la renta con una tasa del 20%. Hoy, el impuesto es progresivo. Propone la exención del impuesto a la renta para quien gana hasta 5 salarios mínimos. Está en contra de la gravación de impuestos sobre grandes fortunas y herencias y de nuevas cargas impositivas a los empresarios.
- Crear el ministerio de Economía que abarque funciones hoy desempeñadas por los ministerios de Hacienda, Planificación e Industria y Comercio.
- Privatizar o cerrar cerca de 50 empresas estatales. Está en contra de la privatización del Banco de Brasil, de la Caixa Económica (de ahorros) y de Furnas (distribución de electricidad). Está en contra de la privatización del sector de generación de energía. En el caso de Petrobras, afirmó que el «núcleo debe ser conservado», pero admitió que la privatización sería necesaria «si no hay una solución respecto a la política de precios de los combustibles».
- Reducir en un 20% el volumen de la deuda pública a través de privatizaciones, concesiones, venta de propiedades inmobiliarias del gobierno central.
- Eliminar el déficit público primario en el primer año de gobierno y convertirlo en superávit en el segundo año.
- Introducir paulatinamente el sistema de capitalización como modelo de financiación para la seguridad social.
- Hacer de Brasil un centro mundial de investigación y desarrollo de grafeno y niobio.