Usando su vía regular de comunicación, Twitter, el presidente Donald Trump amenazó ayer con cortar todas las subvenciones a General Motors después de que la empresa automovilística anunciara un recorte de miles de trabajos.
“Muy decepcionado con General Motors y su presidenta, Mary Barra, por cerrar las plantas de Ohio, Michigan y Maryland”, tuiteó Trump en un primer avance en la red social, al que siguió la siguiente advertencia: “Estamos estudiando cortar todos los subsidios @GM, incluidos los de los coches eléctricos. General Motors apostó a lo grande por China hace años cuando construyeron plantas allí (y en México), no creo que esa apuesta la vayan a amortizar. ¡Estoy aquí para proteger a los trabajadores americanos!”.
También como de costumbre, Trump no ha sido preciso en su amenaza: qué subsidios se refería. Por ejemplo, los vehículos eléctricos de la firma pueden optar a un crédito fiscal de 7,500 dólares según la ley federal, pero no está claro cómo el gobierno podría restringirlos.
El hecho es que, según informa CNN, las acciones de la compañía cayeron en bolsa hasta un 3,8% debido a los tuits. General Motors cerraba con un 2,6% menos, perdiendo un pedazo importante de las ganancias del lunes.
Poco después de que esto sucediera, el diario The Washington Post colgaba en su portal web una entrevista realizada ayer al presidente -una duración de 20 minutos- en la que Trump culpa a la Reserva Federal tanto de las recientes caídas en la bolsa como de los cierres anunciados por General Motors.