Los gestos públicos -la visita de estado del presidente Xi, las entusiastas expresiones del presidente Macri «Mientras mejor le vaya a China, mejor le irá a Argentina, a la región y al mundo»- son importantes, aunque transitorios: son señales en las relaciones internacionales (y un mensaje al nuevo canciller brasileño).
En la coyuntura actual del gobierno argentino, también es clave la ampliación del «swap» con China por 9 mil millones de dólares. Además del F.M.I., Argentina hoy no tiene otro prestamista internacional.
Pero lo que aspira a fortalecer vínculos permanentes es la firma de una treintena de acuerdos bilaterales, que van desde lo económico hasta lo cultural. Enmarcados en el Plan de Acción Conjunta 2019-2023, una hoja de ruta que indica las acciones a realizarse en las áreas política, económico-comercial, inversiones, infraestructura, agricultura, minería, energía, asuntos financieros, transporte, turismo, cultura, educación, ciencia y tecnología, salud, asuntos espaciales, deportes, cooperación Sur-Sur, defensa, … Así se busca dar un horizonte de cumplimiento y viabilidad a los acuerdos, más allá de los cambios políticos que puedan producirse.
Una lista de los principales acuerdos:
- Prórroga de la Validez del Memorando de Entendimiento para el Establecimiento de un Mecanismo de Diálogo Estratégico para la Cooperación y Coordinación Económica (DECCE).
(Es una instancia del más alto nivel para planificar y orientar los aspectos económicos y comerciales de la relación bilateral. En este ámbito se tratan cuestiones referidas a los proyectos prioritarios de infraestructura: las represas patagónicas Condor Cliff y La Barrancosa, la estación de energía fotovoltaica «Cauchari», los proyectos ferroviarios, etc.)
- Convenio para la Eliminación de la Doble Imposición con respecto a los Impuestos sobre la Renta y sobre el Patrimonio y la Prevención de la Evasión y Elusión Fiscal (CDI).
- Memorando de Entendimiento para el Fortalecimiento de la Cooperación Fiscal y Financiera.
(Para plasmar consensos en cuestiones tales como el G-20, la gobernanza económica global, el Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras, impuestos internacionales, la administración de la tesorería, etc.)
- Memorando para la Promoción de la Cooperación Comercial y de Inversiones. Y otro similar sobre Infraestructura
Además, se firmaron convenios para la exportación de cerezas, comercio electrónico, comercio de servicios; también un protocolo sanitario para la exportación de carne ovina y caprina, un convenio para la prevención del tráfico ilícito de bienes culturales, un plan de cooperación cultural, un acuerdo sobre reconocimiento recíproco de certificados de educación superior, sobre cooperación en materia de medios públicos, y otro sobre la lucha contra la corrupción.
Junto con los convenios entre los dos estados, hubo acuerdos con empresas, como el firmado entre el Ministerio de Hacienda y el Banco de Desarrollo de China para la creación de un Fondo por un monto estimado de hasta US$ 1.000 millones para financiar «Capital de Trabajo» , otro para la compra de porotos y aceite de soja que podría alcanzar un valor de entre 1.100 y 1.500 millones de dólares (fue anunciado antes de ayer en AgendAR), un contrato entre el Ministerio de Transporte y la empresa china CRCC para la recuperación del Ferrocarril San Martín Cargas, con el fin de renovar y mejorar 1.020 kilómetros de vías por un total US$ 1.100 millones.
Parece evidente que Argentina no renuncia a la posibilidad de ser un socio estratégico de China, como le propone el embajador Yang Wanming.
A lo que sí se renuncia, por las exigencias del «déficit (primario) cero», y/o la presión estadounidense a construir la central nuclear que financiaba China. De eso, hablamos en otra nota.