En el marco del sistema de bandas cambiarias, el Banco Central estrenó ayer el mecanismo de intervención, previsto para que compre dólares cuando el valor de la divisa perfora un piso determinado, o para que venda dólares cuando dicho valor supera un techo.
Con el dólar en baja, el Central armó una licitación para comprar 20 millones de dólares a un precio de $ 37,305. Como contraparte de la intervención de compra, el BCRA inyectó $746,1 millones de pesos al mercado. Desde mayo del 2017 el Banco Central no compraba dólares en el mercado.
Pese a la intervención oficial, el dólar terminó bajando: en el mercado minorista cerró a $ 38,16 en promedio, 33 centavos por debajo de los $ 38,49 del miercoles.
Los analistas que se pronuncian habitualmente sobre estos temas creen que esta estabilidad en el precio del dólar se extenderá hasta marzo. Una de las razones es que la Reserva Federal de los EE.UU. ha dejado claro que no piensa aumentar las tasas. Entonces, los fondos que quieren beneficios altos seguirán fluyendo a los mercados emergentes.
Hay un motivo interno al país para esta tranquilidad del dólar. Y es la recesión que se prolonga y agrava. No hay demanda de divisas para pagar las importaciones que disminuyen.