Menos del 50% de las pymes de los sectores más afectados por la recesión -prácticamente todas las industriales- pudo pagar el bono salarial de 5 mil pesos.
Los lectores recordarán que el pasado 6 de noviembre el gobierno se reunió con dirigentes sindicales y cámaras empresariales con el objetivo de fijar un bono de fin de año para trabajadores del sector público y privado. El monto que se determinó fue de $ 5.000, en dos bonos de $ 2.500 en noviembre y enero. El acuerdo fue negociado por el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica; y lo firmaron la CGT, la Unión Industrial Argentina y la CAME.
Dos meses después, la información de los sectores empresarios es desalentadora. Uno de los vicepresidentes de la Fundación ProTejer, Jorge Sorabilla, confirmó que «el bono de cinco mil pesos lo pagó un tercio de las empresas». «Es una coyuntura muy compleja, donde el sector textil está trabajando con un 42% o 43% de la capacidad instalada». Sorabilla puntualizó que «las empresas que no trabajaron en estos últimos meses, no pagaron el bono», y «dentro del grupo de las que están trabajando, muchas tampoco pudieron afrontar el compromiso porque está en juego su futuro».
A su turno, el secretario general de la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica (CAMIMA), Aldo Lo Russo, expresó que «el cumplimiento en el pago del bono no llega al 40% de las empresas». En cuanto a las razones, el directivo señaló: «enfrentamos una caída enorme de ventas, a lo que hay que sumar los numerosos cheques rechazados».
Lo Russo añadió que además del universo de pymes metalúrgicas que no pudieron cumplir con el bono de $5.000, «existe un número muy importante de firmas que solamente pagaron $500 o $1.000. Hay que tener muy en cuenta que varias empresas producen tres veces por semana por lo cual están perdiendo capital. También hay casos que cancelaron la primer cuota ($2.500 en noviembre) y la segunda, no (son otros $2.500 en enero)».
Fuentes de empresas nucleadas en la Cámara Industrial de las Manufacturas del Cuero y Afines (CIMA) informaron que «cerca del 50% pudieron pagar el bono». Mientras tanto, en el sector de los fabricantes de calzado el nivel osciló entre el 35% y 40%. En este panorama, los autopartistas tuvieron mejores posibilidades. «La mayoría pagó, aunque varias empresas no lo hicieron por la situación sectorial», remarcaron desde AFAC.