Los especuladores que apostaron a la bicicleta financiera quedaron pedaleando en el aire en marzo. Tras la abrupta suba que registró el dólar en las últimas semanas, aquellos inversores que se inclinaron por el carry trade -invertir en pesos para aprovechar los altos intereses que ofrecía el Banco Central- se quedaron con pérdidas en el mes que acaba de terminar.
Con una apreciación de 10,7% en marzo, la mayor en seis meses, el dólar se volvió imbatible y no hubo rendimientos en pesos que siquiera se le acercaran, a pesar de que la tasa de referencia del Banco Central acumuló en ese período una suba de 1.800 puntos básicos.
Si se toman las Lecap, con un retorno en pesos el mes pasado de 3,3%, la pérdida en dólares fue del 7,1%, según grafica el economista Nery Persichini, gerente de inversiones de GMA Capital. En lo que va del año, agrega, la «bicicleta financiera» acumula una pérdida de 3,9 por ciento.
Sin embargo, en la lucha entre la codicia y el temor, los operadores del mercado financiero, no creen que se cerraron las oportunidades para el «carry trade». Estiman que los dólares de la cosecha y los del FMI podrían abrir estabilizar el precio de la divisa norteamericana, al menos por un corto plazo.
«El ingreso de agrodólares y las ventas del Tesoro deberían contribuir a estabilizar el precio de la divisa», afirma Persichini. Mientras tanto, el aumento del límite de los bancos para invertir en Leliq ayudarían a mejorar el canal de transmisión desde la tasa de referencia a las tasas pasivas de los bancos, lo que redundaría en mejores rendimientos para los activos en pesos.
Por todo esto, desde GMA Capital consideran que «podría haber una ventana de oportunidad en el corto plazo». «Para aprovecharla, vemos valor en bonos Badlar provinciales (spread cercano a 10 puntos porcentuales) y también en títulos CER cortos, que rinden 12% sobre inflación».