Esta semana de abril -con sólo tres días hábiles; coincidía con Semana Santa- el gobierno nacional lanzó una serie de medidas que algunos bautizaron Plan Felices Pascuas, y también Plan Octubre. En otras notas en esta página las hemos analizado. Pero aquí nos interesa hacer notar que -más allá si representan o no una modificación importante de sus políticas (en AgendAR opinamos que no)- es evidente que representan un cambio fundamental en el discurso. Como dicen que hizo un rey de los francos, al convertirse al cristianismo, Macri y sus ministros «adoraron lo que antes habían quemado y quemaron lo que antes habían adorado».
Un economista favorable a la orientación del gobierno, Juan Carlos de Pablo, tuvo que decir: «Lo que ayer era una bobada ahora no puede ser una genialidad«.
Para que se note mejor esto, hemos elegido una serie de titulares de estos últimos dos días. Seleccionamos, atención, en medios oficialistas o cercanos.
El gobierno nacional publica una lista de 64 productos que mantendrán sus precios por 6 meses.
Tarifas: no habrá más subas de luz ni transporte y se compensarán con subsidios.
Créditos ANSeS: en cinco horas se recibieron 35.000 solicitudes. Van desde $ 12.000 a $ 200.000 y se pueden pagar en hasta 60 cuotas. Las tasas oscilan entre el 40% y el 50%. Preven volcar al mercado más de $ 125.000 millones. (Aquí somos escépticos hasta del anuncio. ¿Puede haber 35 mil personas apuradísimas por endeudarse con intereses cercanos al 50%?)
La AFIP lanzó un plan de facilidades de hasta 60 cuotas para saldar deudas impositivas.
Prohíben que los bancos cobren por depositar efectivo.
Dólar: el Banco Central congeló hasta fin de año el techo y el piso de la banda cambiaria.
En cuanto al control de estas medidas, en especial de los «Precios Cuidados», se notan algunas diferencias en el equipo del gobierno:
Nicolás Dujovne dice que no hubo remarcaciones y que se trata de «un acuerdo de caballeros».
El Gobierno promete mayor fiscalización para los precios “esenciales”.
Ahora, de lo que no hay dudas es de la reacción de los mercados internacionales, a los que este gobierno siempre ha tratado de seducir:
Se desplomaron más de 9% las acciones argentinas en Wall Street.
El riesgo país salta a 854 puntos.