Aumenta la morosidad en familias y empresas

Por el aumento de las tasas de interés, la caída de la actividad y del empleo y la pérdida del poder adquisitivo, en los últimos meses se verificó un aumento en la morosidad por préstamos personales y de tarjetas de crédito, en las familias y líneas de crédito otorgadas a empresas.

En lo que respecta al sistema financiero, registró a enero de 2019 una cartera irregular de 3,3% frente al 1,8% del año previo. El mayor ratio de esta cartera lo presentan las entidades financieras (no bancarias) volcadas al consumo, lo que resulta evidente en un contexto de afectación de la industria generadora de este tipo de créditos.

«Si bien la cartera que presenta mayor morosidad es la del consumo familiar, en el último trimestre del 2018 se observó un empeoramiento en el segmento empresas, justamente en un escenario donde la economía cayó 2,6% (menor demanda), con una fuerte devaluación (que generó un aumento de costos sin su consecuente traspaso pleno a precios), y tasas de interés reales muy altas.», consignó el informe de PwC.

Son los bancos privados los que muestran mayor tasa de morosidad y dentro de ellos los de capitales extranjeros. «Los bancos hoy, a diferencia de los 90, están calzados y líquidos con lo cual, a priori, no deberían enfrentar un problema de solvencia, ya que además si bien se espera pueda seguir aumentando la morosidad, lo seguirá haciendo de forma gradual».

VIAClarín