Ayer se presentó en la Cámara de Diputados el proyecto de ley de creación del Instituto Nacional del Libro Argentino (INLA). El argumento central es que la del libro es una de las industrias culturales argentinas, clave desde el punto de vista simbólico y material, pero hasta ahora no cuenta con una institución que la promueva, como el teatro, la música o el cine, que tienen al Instituto Nacional de Cine y Arte Audiovisuales (INCAA) y el Instituto Nacional de Teatro.
El proyecto propone la creación de un organismo autárquico, para diseñar y promover políticas de estímulo y producción editorial y defender los derechos de los distintos actores que participan de la cadena del libro: autores, editores, libreros, distribuidores, traductores y diagramadores. Y encarar sus tareas con un criterio federal, para modificar la aplastante concentración actual en la ciudad de Buenos Aires.
La iniciativa, sobre la que se trabajó durante un año -con aportes de los investigadores Heber Ostroviesky y Alejandro Dujovne- fue impulsada por el presidente de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, Daniel Filmus (FPV) y ya cuenta con el apoyo de distintos bloques partidarios (UCR, PJ, FpV, Movimiento Evita, entre otros), además de un vasto colectivo de escritores y editores que participa de su construcción y difusión.
Entre los escritores que acompañaron la presentación del proyecto se cuentan Claudia Piñeiro, Julian López, Luisa Valenzuela y Alejandro Dolina. Sobre todo, invitamos a visitar la página «Declaración de apoyo a la creación del INLA». Nos impresiona el número de creadores que se ha sumado a esta iniciativa, desde una actividad tradicionalmente individualista.
Desde AgendAR deseamos suerte a la iniciativa. No podemos dejar de recordar la actividad cultural que se desplegó en este rubro en Argentina, hasta la década de los 1990.