Auth0, una empresa argentina que provee una plataforma de autenticación y autorización (se usa al momento de registrarse) para aplicaciones web, móviles y legales, se convirtió en un nuevo unicornio argentino al llegar a la valuación de US$ 1000 millones, tras una ronda de inversión en Estados Unidos en la que sumaron US$ 103 millones.
Los unicornios, en el ámbito de los negocios, son empresas emergentes, de base tecnológica, que en muy poco tiempo llegan a tener una cotización mayor a los mil millones de dólares.
Son unicornios Facebook, Twitter, Airbnb, Snapchat, Uber, We Work y Dropbox, entre otros. Pero Latinoamérica no se queda afuera de este fenómeno corporativo porque tiene al menos diez empresas unicornio, y ahora cinco son argentinas: Globant, MercadoLibre, Despegar, OLX y Auth0.
«Estas cosas no son de un día para el otro, sino que se preparan con tiempo y ayuda el marco de crecimiento que estamos teniendo. La industria del software empuja un montón a estas empresas. Hace menos de un año levantamos US$60 millones y teníamos una valuación de US$500 millones, con lo cual duplicamos nuestro valor», contó Matías Woloski, CTO y co-fundador de Auth0.
Y la expectativa es seguir creciendo en clientes (actualmente tienen 7000 corporativos) y continuar duplicando año a año la facturación con oficinas en Japón, Londres, Sidney Matías Woloski, CTO de Auth0, y Eugenio Pace, CEO de la compañía
«La autenticación es un problema que toda empresa tiene que resolver, con lo cual nuestra solución tiene un potencial ilimitado, porque se aplica a todo el mundo, a todas las empresas y a todos los rubros», agregó.
Según contó, él y su socio Eugenio Pace, el CEO de la compañía, comenzaron a pensar en el negocio de la autenticación en 2008, cuando empezó a asomar a gran escala la posibilidad de hackear empresas para hacerse de las cuentas de los consumidores.
″Vimos que había una necesidad de simplificar el problema: con los productos que había en ese entonces, el programador tenía que ser un experto en criptografía y protocolos para resolver el tema de la autenticación, mientras que nosotros le podíamos dar una librería para poner su aplicación en cualquier plataforma», explicó. Pero a los programadores no les gusta pagar por cosas así que apuntaron a las compañías, y en 2013 consiguieron su primer cliente importante: un contrato de cientos de miles de dólares. A fines de ese año les ofrecieron US$2 millones por su compañía, oferta que rechazaron.
En 2014, tuvieron su primera ronda de inversión y recibieron fondos de NXTP Labs y BVP Partners. En 2015, nuevamente recibieron inversiones y empezaron a pensar en crecer en escala, es decir, no solo con el producto, sino también en el servicio asociado, la posventa y el marketing.
«Tenemos un montón de desarrollo para hacer en el sentido de la autenticación. Los passwords son una solución vieja. Estamos en una posición en que podemos darles a los programadores una plataforma que funcione, que pueda leer más variables del entorno, como la huella digital o la cara, para no pedir el password todo tiempo», contó, y agregó que esto ayudará a hacer más segura internet. «Hoy hay bases de datos con un millón de passwords y cualquier hacker va atacando distintos sitios hasta entrar en la cuenta de alguien, robársela y revenderla. Eso, a escala de todas las suscripciones que hoy existen», concluyó.