La reforma previsional en Argentina está incluida en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. En un reciente documento de ese organismo (“El futuro del ahorro: el rol del diseño de los sistemas de pensiones en un mundo que envejece”) que fue presentado con fuertes elogios por David Lipton, subdirector gerente del FMI, se realizan recomendaciones muy concretas a la Argentina y a Brasil.
El estudio dice que “para lidiar con los costos del envejecimiento, muchos países implementaron significativas reformas de los sistemas previsionales en los últimos años. Las reformas apuntaron en gran parte a contener el crecimiento del número de jubilados, modificando los parámetros claves del sistema; por ejemplo, incrementando la edad de jubilación, endureciendo las reglas para acceder a los beneficios o reduciendo el tamaño de las jubilaciones a través del ajuste en las fórmulas de cálculo de los beneficios”.
En el Report 16/346, de noviembre de 2016, de evaluación del programa del Gobierno, el FMI propuso:
* Incrementar en forma gradual la edad de jubilación, en especial de las mujeres. Actualmente, las mujeres pueden jubilarse a los 60 años, con 30 años de aportes, y los varones a los 65 años, también con 30 años de aportes, con la opción de jubilarse a los 70 años.
* Reducir el haber inicial de los futuros jubilados. Esto es bajar en un 20% el “ratio” del haber jubilatorio inicial (que hoy ronda entre un 55 y un 65% del salario promedio de los últimos 10 años, muy lejos del histórico 82% móvil»). A modo de ejemplo el FMI dice que en muchos países el haber al momento del retiro jubilatorio es del 50% del salario e incluso menos.
En ese Report también se proponía modificar la fórmula de actualización de la Ley de Movilidad que se concretó en diciembre de 2017 y que, hasta ahora, en un año y medio, produjo una reducción del 20% de los haberes de los jubilados y demás beneficiarios de prestaciones sociales.
Otros cambios serían:
* Modificar los regímenes especiales que tienen ciertas actividades que se jubilan con el 82 o 85% del salario, como docentes, docentes universitarios, investigadores científicos, Luz y Fuerza, Servicio Exterior y Poder Judicial.
* Pensión por viudez: eliminarla para los cónyuges que trabajan o están jubilados o jubiladas.
* Restablecer un sistema privado de capitalización. Hay dos alternativas: dejar abierta una opción para que el trabajador derive una parte o todo el descuento jubilatorio a un régimen privado y otorgar incentivos fiscales para realizar aportes adicionales a un sistema privado.