En el mes que acaba de concluir, junio ´19, la AFIP recaudó 52,1% más que en el mismo período de 2018. Aún así, los ingresos por impuestos volvieron a quedar por debajo de la inflación. En este mes, la brecha entre la recaudación y la inflación fue de -2,4%, según informó ayer el titular del organismo, Leandro Cuccioli.
Los ingresos tributarios ya llevan un año creciendo por debajo de la inflación. La última vez que se expandieron más que los precios fue en junio del 2018, con una variación positiva del 1,9%. Es cierto que la brecha entre la recaudación y la inflación se va achicando mes a mes: pasó de un pico de -11,3% en marzo al -2,4% de junio.
La importancia de este dato es que refleja con claridad el problema que siempre enfrentan los planes de ajuste, en nuestro país y en todo el mundo. Al reducir el gasto público, disminuye la actividad de las empresas y el consumo. Automáticamente, caen Ganancias, Ingresos Brutos, I.V.A. Aumenta el deficit fiscal, lo que obliga a disminuir otra vez el gasto público. Al mismo tiempo, con los ingresos disminuidos, las empresas y los contribuyentes individuales se quejan, con razón, de la carga impositiva…
Por supuesto, tienen razón los que dicen que no hay recetas mágicas. No es posible ignorar, a la larga, el problema del deficit fiscal. Pero es muy loco insistir con la receta que agrava la enfermedad.