Por una política de empleo

La Red de Centros de Formacion de la CGERA ha preparado, con el auspicio de su entidad madre y de la CEPBA, bajo la dirección del Dr. Guillermo Siro, «EMPLEO 2020», un proyecto para una política de empleo. Invitamos a acceder al texto (12 carillas) cliqueando aquí, y reproducimos abajo la Introducción, donde se señala que las estadísticas y registros actuales de empleo son imcompletos, y la necesidad de coordinar los esfuerzos de distintas entidades para obtener el cuadro de situación adecuado.

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Toda política de empleo virtuoso y sustentable debe estar basada en la producción, el desarrollo regional, el trabajo decente y la construcción de una sociedad justa y con futuro. Los desequilibrios regionales han sido y son una de las principales causas del deterioro del trabajo y la producción argentina. Y la desvinculación de las políticas de empleo con las realidades productivas regionales presentes y futuras han deteriorado tanto la calidad del empleo como las cadenas de valor sectoriales, en las cuales el trabajo argentino debe ser el factor que promueva la competitividad a través de la transformación de nuestros recursos naturales y la incorporación de valor agregado, entendido éste como la conjunción de identidad cultural, raíces , innovación y tecnología.

El diseño de cualquier política pública requiere un adecuado diagnóstico que permita conocer el estado de situación, problemáticas, fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas. Lamentablemente, la información disponible acerca de la estructura productiva nacional es anticuada, incompleta e insuficiente para la toma de decisiones tanto en el sector privado como en el público. Esta falencia es notable en dos niveles fundamentales: por un lado, no se dispone de bases de datos actualizadas de empleo y de empresas que permitan construir conocimiento práctico sobre la estructura y la dinámica del aparato productivo.

Por otro lado, y quizá como consecuencia de la falta de datos básicos, existe una notable escasez de estudios teóricos y empíricos desde una perspectiva que contemple el conjunto de los sectores. Estas debilidades informativas impiden todo intento de planificación y diseño de políticas y cursos de acción eficaces. Dicho fenómeno afecta al conjunto de políticas públicas destinadas a acompañar o dirigir el desarrollo de la estructura productiva argentina y al conjunto de acciones de la iniciativa privada (empresas, organizaciones no gubernamentales, etc.) que buscan una inserción consciente en eltejido productivo nacional. En otras palabras, sin contar con un adecuado registro actualizado de datos básicos sobre la producción y sin estudios elaborados sistemáticamente con base en ese registro que desarrollen nuevos conocimientos sobre la estructura productiva, no podrá avanzarse en el entendimiento concreto de la misma, ni en la praxis (teoría para la acción) del desarrollo.

Los casos donde puede apreciarse la importancia de lo dicho anteriormente son abundantes en casi todas las áreas de intervención pública. Tomando el caso de las pequeñas y medianas empresas (pymes) para ejemplificar las carencias informativas, puede observarse que el fenómeno excede incluso a nuestro país. Aún con diferencias significativas entre los países de la región, las políticas pymes tienen en común una baja prioridad dentro de las acciones de gobierno y una llamativa falta de disponibilidad de instrumentos apropiados, incluso para alcanzar modestos objetivos de política. Sin embargo, y paradójicamente, las pymes representan en la gran mayoría de los países, el sector con mayor porcentaje en la generación de empleo y en la democratización y diversificación de las economías. En el caso puntual de la Argentina, se estima que más del 70% del empleo privado depende de las pequeñas y medianas empresas.

Prácticamente en todos los países de la región, la información elaborada por los organismos encargados de recolectar los datos estadísticos se basa en criterios que definen los tamaños de las empresas según la cantidad de ocupados. Por el contrario, las instituciones encargadas de diseñar e implementar las políticas de apoyo identifican a sus beneficiarios según criterios que se basan en la facturación de las empresas. De esta manera, resulta incompatible la comparación de los resultados obtenidos aplicando una u otra definición (según cantidad de ocupados o según facturación).

Este primer diagnóstico sobre la situación económica y social de la Argentina y en particular de la Provincia de Buenos Aires, da cuenta de la necesidad de encarar un PLAN que permita favorecer el desarrollo económico a partir de lograr el aprovechamiento de las oportunidades que brindan los mercados internacionales y nacionales por parte de las pequeñas y medianas empresas generadoras de empleo. Para que dicho plan sea eficiente y pueda lograr aumentos de competitividad -que impactarían en el empleo y en la disminución de la desigualdad- debe integrar las carteras ministeriales vinculadas a la producción y el trabajo, a la vez que las organizaciones y actores sociales involucrados.

CREACIÓN DEL OBSERVATORIO DE PRODUCCIÓN, EMPLEO Y DESARROLLO
REGIONAL:

De lo dicho precedentemente surge la necesidad de crear un ente tripartito (Estado, trabajadores, empresarios), que cumpla los siguientes objetivos:
● Recoger la demanda y problemáticas en términos de empleo.
● Homogeneizar los criterios a partir de los cuales se segmente y categorice al sector pyme, buscando asimismo que dichos criterios respondan a la heterogeneidad del mismo.
● Identificar y relevar cadenas de valor, su situación y demandas.

Dicho trabajo debe ser articulado de forma conjunta entre los Ministerios de Trabajo, Producción, Ciencia y Tecnología, Educación y Desarrollo Social a través de Consejos Consultivos Sectoriales por actividad y sector, a fin de planificar y ejecutar políticas y acciones de promoción del empleo en el corto y mediano plazo en las diferentes regiones de nuestra República. De igual modo deben conformarse a tales efectos, espacios de articulación con los actores sociales involucrados: organizaciones de pymes, gremios, universidades nacionales, institutos tecnológicos, …