China se plantea el diseño de toda una «ciudad forestal» de 30.000 habitantes que sea completamente sostenible y en lugar de contaminante, generadora de aire limpio.
El proyecto está en marcha desde hace más de dos años, y lo impulsa la ciudad-prefectura de Liuzhou, en la región autónoma de Guangxi. Liuzhou es famosa por su industria. Junto con Pekín y Shanghái, son las tres ciudades que llegaron a producir 1 millón de coches por año en 2009. Sin duda, produce tanta contaminación atmosférica como cualquier gran ciudad en Occidente. Pero China, ahora que se ha desarrollado, le interesa dar señales que se preocupa por el medio ambiente.
Se trata de un megaproyecto diseñado para crear la primera ciudad forestal del mundo al norte de Liuzhou. La futura «ciudad bosque» aspira a absorber casi 10 mil toneladas de CO2 y 55 toneladas de contaminantes al año. Esto supondría producir cerca de 900 toneladas de oxígeno.
La idea es sencilla: en lugar de talar y acabar con la vida vegetal, hacer convivir a la arquitectura local con 40,000 árboles y 1 millón de plantas de 100 especies.
Al igual que con la nueva ley francesa de «tejados verdes», todos los edificios estarán cubiertos de plantas para combatir al calentamiento global. Los tejados en los edificios con plantas y arbustos, ayudaran a absorber el agua de lluvia, y proporcionaran espacios verdes en zonas urbanas que pueden jugar un papel importante en la reducción del efecto urbano de “isla de calor”.
Pero la convivencia con las plantas y la reforestación de la tierra no es el único elemento distintivo de esta ciudad. Toda la energía eléctrica será generada a través de paneles solares y energía geotérmica.
El proyecto fue encargado al famoso estudio de arquitectura italiano Stefano Boeri Architetti, el mismo que diseñó el Bosque Vertical en Milán y en Utrecht.
Una ciudad de 30 mil habitantes es sólo un símbolo. Pero un símbolo inspirador. Nuestro país, de todos modos, no está hoy en condiciones de financiar algo similar. Pero tenemos arquitectos, técnicos y pymes industriales en abundancia. Debemos proyectar lugares para ellos en los necesarios proyectos de energía que no provenga de combustibles fósiles. No como hasta ahora, que el insumo local ha sido, principalmente, el sol y el viento.