Todos los sectores del sistema sanitario argentino, privado, público y de la seguridad social emitieron ayer un comunicado conjunto advirtiendo de la grave situación a la que se enfrenta, con una ocupación promedio de camas de más del 69% en el Área Metropolitana de Buenos Aires por «el vertiginoso aumento de contagios» del covid-19, y pidieron «tomar medidas más drásticas» para reducir esa suba.
El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, publicó en las redes sociales «Comparto el revelador comunicado conjunto de los subsectores de la salud privado, público y de la seguridad social, titulado ‘El sistema de salud tiene un límite’, que pone en alerta sobre la situación crítica que vivimos en este momento».
El documento expresa «una profunda preocupación» por la tensión que atraviesa nuevamente el sistema de salud argentino y «el vertiginoso aumento de contagios de todo el país, pero principalmente en el Área Metropolitana de Buenos Aires».
«La ocupación promedio de camas en AMBA alcanza el 69,2%, cuando hace dos semanas era del 56,5%. Esas cifras promedio representan que haya ya muchos centros de salud por arriba del 90% de ocupación«.
«Ese escenario demuestra el acelerado aumento de la demanda que ha provocado un incremento exponencial de la ocupación de camas de Unidades de Cuidados Intensivos. En esta peligrosa dinámica el AMBA emerge como un territorio único donde se intensifican los traslados de pacientes desde CABA a la Provincia de Buenos Aires, y viceversa«.
En el comunicado, hacen un «llamado de solidaridad y responsabilidad a la comunidad para respetar los cuidados necesarios, reducir al máximo las salidas y el contacto con otras personas».
Asimismo, destacaron que se requiere del trabajo articulado entre el Estado, el sector privado, el de la seguridad social y todas las jurisdicciones «para garantizar la adecuada atención y evitar el colapso del sistema de salud».
Tras aclarar que acompañan las medidas adoptadas por el Gobierno nacional, que significan un punto de partida para intentar frenar los casos, aseguraron que «es necesario tomar medidas más drásticas para reducir la escalada en la transmisión de manera rápida y contundente» y sentenciaron que «a este ritmo no hay sistema de salud que aguante«.
El comunicado tiene las firmas del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, IOMA, PAMI, Swiss Medical, OSDE, Osecac, OSPE, Oschoca, Ospica, Fecliba, Aclife, FAPS, Emergencias de Traslados, Emergencias SA, Buenos Aires Call, Sindicato de Salud Pública, ATE, Cicop, AMRA y UPCN.
Emergencias y traslados, otro punto de quiebre en el sistema:
También se sumó al reclarmo la Federación de Cámaras de Emergencias Médicas y Medicina Domiciliaria (FEM) al alertar por el «abrupto incremento de la demanda».
«El sistema de salud debe enfrentar esta Segunda Ola con equipos de salud extenuados como consecuencia de los efectos de todo un año de pandemia. Sin perjuicio del avance del plan de vacunación del personal de salud, los equipos de trabajo de las distintas instituciones de salud aún siguen sufriendo contagios, aislamientos preventivos y, como consecuencia, menor cantidad de personal disponible a la hora de prestar el servicio», expresa la FEM en un comunicado.
Según datos de la FEM, en los últimos 14 días -y comparados con los 14 días precedentes- la cantidad de traslados de pacientes sospechosos o COVID confirmados se incrementó en un 44%, mientras que se está experimentando un exponencial aumento en la cantidad de llamados entrantes de las empresas del sector, demoras de más de 10 horas en el envío de un profesional médico a domicilio e importantes demoras en los traslados de pacientes no urgentes, generando retrasos en todo el sistema y malestar en la sociedad.
«Se solicita el uso responsable del sistema de emergencias, dejando libres las líneas de contacto de riesgo de vida para tal fin, y utilizando alternativas como la telemedicina para la atención médica no urgente. La demanda actual de los distintos tipos de atenciones prehospitalarias excede la capacidad del sistema».