China advierte de límites en la eficacia de sus vacunas. Cuestionan a Sinovac

El director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de China, Gao Fu, admitió que la eficacia de las vacunas contra covid-19 de su país “no es muy alta”, y apuntó que se estudia la mezcla de varias o un cambio en las pautas de vacunación a fin de aumentar la eficacia de los fármacos.

Las inmunizaciones producidas localmente han arrojado una eficacia que oscila entre el 50% y el 79%, inferior a las empleadas en EE.UU. -Pfizer, del 95%, y Moderna, del 94%- aunque no necesitan las estrictas condiciones de frío de estas.

Gao indicó en una conferencia en la ciudad de Chengdú -capital de la provincia de Sichuan- que evalúan dos vías de mejora “para solucionar el problema de que la eficacia de las vacunas actuales no es muy alta”, según publicó ayer domingo el diario de Hong Kong South China Morning Post.

Una sería ajustar la inoculación ―ya sea aumentando la dosis, el número de dosis o el espaciado entre estas― y la otra, combinando vacunas de distinto tipo de tecnología.

Según el medio, “es la primera vez que un científico chino ha debatido en público la eficacia relativamente baja de las vacunas chinas”. Sin embargo, en una entrevista con el diario estatal Global Times publicada ayer, Gao consideró que los medios malinterpretaron sus palabras como una admisión de que las vacunas chinas son poco eficaces.

“Las tasas de protección de todas las vacunas del mundo a veces son altas y a veces, bajas. La mejora de su eficacia es una cuestión que los científicos de todo el mundo tienen que plantearse”, apuntó. “A este respecto, sugiero que pensemos en ajustar el proceso de vacunación, así como el número de dosis e intervalos, y adoptemos vacunación secuencial con distintos tipos de antígenos”.

Por su parte, el experto en vacunas Tao Lina, presente en la conferencia de Chengdú, indicó: “Los niveles de anticuerpos generados por nuestras vacunas (chinas) son más bajos que las del ARN mensajero (tecnología usada por las vacunas de Pfizer y Moderna), y los datos de eficacia también son más bajos. Por eso, creo que es una conclusión natural que nuestras vacunas de virus inactivado y vector de adenovirus son menos efectivas que las de ARN mensajero”.

Este funcionario, según Asociated Press, cuestionó en el pasado la seguridad de las vacunas de mRNA. La agencia oficial de noticias Xinhua citó en diciembre declaraciones suyas en las que dijo que no podía descartar efectos secundarios negativos porque era la primera vez que se empleaban esas vacunas en personas sanas.

China es uno de los principales productores de vacunas y ya distribuyó cientos de millones de dosis a otras naciones, como la Argentina, donde en la campaña de inoculación es utilizada la llamada Sinopharm. Otra de las drogas fabricadas en China es la Sinovac, que se implementa en Chile y que de acuerdo a la investigación realizada en Brasil tiene una tasa de efectividad de apenas un 50,4%.

En China aún no se aprobó ninguna vacuna extranjera. Hasta ahora, se ha dado la aprobación para el uso de emergencia a cuatro vacunas contra el covid: dos desarrolladas por la farmacéutica Sinopharm (ambas de virus inactivado), una por Sinovac (virus inactivado) y otra por CanSino (vector viral no replicante). Beijing ha enviado millones de vacunas que se están inoculando en países de Asia, África y América Latina.

En el caso de la vacuna de Sinovac, se realizaron ensayos clínicos fuera de China que dejaron distintas tasas de eficacia: mientras que las pruebas realizadas en Turquía arrojaron una efectividad del 91,25%, los datos proporcionados por Indonesia apuntaron a un 65,3% y Brasil rebajó al 50,4% el porcentaje, una semana después de haber anunciado un 78%.

Las tasas de efectividad de las vacunas de Sinopharm son de entre el 72,5% y el 79%, mientras que CanSino afirma que su fármaco tiene una eficacia del 75%. El fármaco de Pfizer arroja una eficacia del 95%, similar al de Moderna, con un 94%. La de AstraZeneca es del 70%, y la de Janssen, del 66,9%.

El 31 de marzo, el grupo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que estudia las vacunas contra el covid-19 explicó que está terminando su análisis de las desarrolladas en China por Sinovac y Sinopharm, y en los próximos días confirmará si autoriza o no su uso de emergencia.

VIAEl País