Chery anunció sus planes en nuestro país: quieren usar las reservas de litio para fabricar las baterías que impulsen los autos. También estudian invertir en la industria naval y en curtiembres.
La automotriz Chery -que fue la primera marca china en desembarcar en Argentin- ahora quiere ser la primera en fabricar autos eléctricos. Al menos así lo dijo el presidente de la compañía, Yin Tongyue, al embajador argentino en el país asiático, Sabino Vaca Narvaja, en el marco de una visita oficial del diplomático al complejo industrial que la automotriz posee en la provincia de Xinjiang.
De concretarse, se trataría de un paso fundamental de la marca china para ganar protagonismo en el país, sobre todo en el incipiente mercado de los autos eléctricos. Para ello aprovecharía las facilidades que otorgará la Ley de Electromovilidad, cuyo envío al Congreso por el presidente Alberto Fernández, y que busca utilizar las reservas naturales litio para impulsar la fabricación de baterías para la propulsión de automóviles.
Por ahora, la automotriz creada en 1997 con gran participación del Estado chino tiene dos plantas en Sudamérica. Una está en Carrasco, Uruguay, montada en alianza con el grupo Socma; la otra en San Pablo, Brasil. La compañía se encuentra presente en el ámbito local con una red de concesionarios que comercializa los modelos QQ, Arrizo y Tiggo.
Los proyectos de Chery en la Argentina abarcan también otros rubros. Siempre a decir de Vaca Narvaja, la empresa (que posee un astillero en Wuhu, provincia de Anhui) tiene proyectos para reactivar la industria naval, aprovechando la capacidad ociosa de los astilleros Tandanor y Río Santiago.
Además, los empresarios chinos también plantearon la posibilidad de invertir en una curtiembre en La Rioja, con el objetivo de producir el cuero necesario para sus autos. Una propuesta en ese sentido ya fue elevada a la Secretaría de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial Externa que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación.