El informe «Estado del Clima en Argentina 2020», se elabora anualmente y presenta una evaluación de las condiciones climáticas que afectaron a la Argentina el año pasado.
El Estado del Clima de Argentina (cliquear para acceder) es uno de los informes más amplios, detallados y profundos que se realizan en el país en materia climática. Tiene por objetivo resumir y documentar los principales indicadores del comportamiento del clima durante el año y se publica coordinadamente con el informe mundial Estado del clima global (ver State of the Global Climate 2020, OMM 2021), de tal manera de aprovechar sus resultados y, al mismo tiempo, tener una visión a nivel país y mundial.
El contenido de este reporte se concentra en aquella información que pueda ser de interés para quienes deseen conocer cómo la evolución de factores meteorológicos pudo haber impactado las diferentes actividades durante el 2020. Además, este año se suma al informe, una mirada sobre las consecuencias de la pandemia de COVID-19 en los gases de efecto invernadero y el ambiente.
Este informe final actualiza los datos preliminares emitidos en enero de 2021 y es el documento oficial que registra algunos indicadores del sistema climático, entre los que se incluyen las concentraciones de gases de efecto invernadero, el incremento de las temperaturas, las variaciones de las lluvias, los incendios, el impacto de La Niña y los fenómenos meteorológicos extremos entre otros.
Clima de Argentina 2020
El 2020 resultó uno de los tres años más calientes nunca antes registrados en Argentina, además de ser 2011-2020 la década con mayor temperatura media registrada, evidenciando así la tendencia del incremento de la temperatura media global atribuida a las emisiones de gases de efecto invernadero.
También se destacaron eventos puntuales de calor extremo, como los récords en las bases argentinas de Antártida durante febrero y los 39.6°C registrados en Formosa durante agosto.
La tendencia ascendente de la temperatura anual no excluye que se sigan experimentando inusuales períodos fríos de manera esporádica, como sucedió durante este invierno en Perito Moreno, con -20°C registrados, y en la Antártida, que presentó desvíos negativos de temperatura.
Con respecto a las precipitaciones, el 2020 estuvo marcado por una sostenida y amplia sequía que lo convirtió en el quinto año más seco de los últimos 50. El último cuatrimestre del 2020 estuvo modulado por el desarrollo del fenómeno La Niña que continuó durante los primeros meses de 2021 y, posiblemente, haya favorecido las pocas lluvias de algunos sectores del país.
Los efectos de la pandemia
La pandemia también tuvo efectos en el medioambiente, a través de las restricciones a actividades y movimientos de la población. Las mediciones de ciertas variables, especialmente de aquellas relacionadas con la contaminación provocada por el tránsito de vehículos, muestran la huella de la pandemia a través de una baja significativa, pero temporaria, de algunos gases. Aún así, el efecto fue poco marcado en lo que respecta a la acumulacion de dióxido de carbono en la atmósfera, que continuó creciendo.
Con respecto a la radiación ultravioleta, el año resultó con características muy cercanas al promedio, aunque se vivieron días donde la extensión del agujero de ozono llegó a mínimos históricos en Ushuaia y la península Antártica.