El proyecto asegura beneficios a 20 años para las inversiones petroleras en todo el país, pero con el foco puesto en Vaca Muerta. Habrá autorización para exportaciones por un 20% de lo que aumente la producción, con la disponibilidad del 50% de esas divisas.
La Secretaría de Energía envió a la de Legal y Técnica de Presidencia, a cargo de Vilma Ibarra, el proyecto de Ley de Promoción de Inversiones Hidrocarburíferas. Se trata de una iniciativa que incluye un régimen de promoción para las inversiones petroleras para los próximos 20 años con el objetivo de incrementar la producción petrolera en el país, sobre todo en Vaca Muerta.
Las compañías beneficiarias tendrán como beneficio, entre otros puntos, la autorización para exportaciones garantizadas por un 20% de su producción incremental con la disponibilidad del 50% de esas divisas. El restante 80% deberá ser ofrecido al mercado interno.
Fuentes oficiales también señalaron que el proyecto pdría presentarse esta semana en el Congreso para su tratamiento, y agregaron que la idea es “resolver los desafíos del sector energético, generando incentivos que impulsen la inversión, sin dejar de atender el frente fiscal, cuidando el abastecimiento interno e impulsando la soberanía energética”.
Exportaciones, dólares y actividad
El proyecto prevé “fomentar el incremento de la producción para el autoabastecimiento y multiplicar las exportaciones de hidrocarburos” y robustecer el ingreso de divisas y las reservas del Banco Central (BCRA), “incrementando el valor agregado regional y nacional en la cadena de valor de la actividad”.
La iniciativa pretende “dar un gran impulso al sector promocionando todas las actividades que directa o indirectamente están relacionadas con la industria hidrocarburífera, en especial la exploración y producción mediante técnicas de extracción convencional y no convencional”, aseguraron las mismas fuentes.
También tiene como objetivo promover el transporte, compresión, separación, tratamiento, almacenaje y la industrialización de los hidrocarburos y sus derivados a través de procesos que los utilicen como materia prima, incluyendo -sin limitación- la petroquímica, la producción de fertilizantes, licuefacción de gas natural y la refinación de combustibles.
La norma establece un régimen de promoción para la exploración y producción de petróleo, otro relacionado con la producción de gas natural con incentivos para el compromiso de abastecimiento del mercado interno por parte de las productoras, y la determinación de exportaciones garantizadas en función del incremento de la producción.
Además, habrá menores requisitos y mayores beneficios para las cuencas maduras y en declino de producción convencional y para los campos marginales.
Desde el gobierno se está haciendo una apuesta fuerte a aumentar la producción de petróleo, y el ingreso de divisas, antes que la explotación de combustibles fósiles se haga más difícil. en tanto lo gobiernos poderosos asuman el peligro del calentamiento global.