Se pudo fechar con precisión la presencia de vikingos en América: fue hace mil años

Reconstrucción del asentamiento vikingo de L'Anse aux Meadows, en el nordeste de Canadá; el sitio es Patrimonio de la Humanidad

Un grupo de científicos fechó con precisión, concretamente en el año 1021, la presencia de vikingos en América del Norte, gracias a una radiación cósmica que dejó rastros en fragmentos de madera de esa época.

Los historiadores saben desde hace décadas que los legendarios marinos escandinavos fueron los primeros europeos que llegaron al continente americano, en torno al año 1000, casi 500 años antes que Cristóbal Colón.

Hasta ahora el único sitio conocido con rastros de su presencia es L’Anse aux Meadows, en el extremo norte de la isla de Terranova (Canadá), una pequeña bahía en la que subsisten los yacimientos de ocho edificios.
Reconstrucción del asentamiento vikingo de L'Anse aux Meadows, en el nordeste de Canadá; el sitio es Patrimonio de la Humanidad
Ubicación del asentamiento vikingo de L’Anse aux Meadows, en el nordeste de Canadá.
.

La datación con carbono 14 que se hizo de esos restos en el siglo XX era muy imprecisa, en un lapso de unos 250 años, explica un estudio publicado en la revista Nature.

Todo indica que la ocupación de ese emplazamiento fue breve y esporádica, gracias a la exploración arqueológica y al testimonio de las “Sagas”, los textos semilegendarios que narran las epopeyas de los vikingos.

El viaje vikingo representa múltiples hitos para la humanidad. El asentamiento ofrece la evidencia más antigua conocida de un cruce transatlántico. También marca el lugar donde los humanos finalmente recorrieron el total de la circunferencia del mundo, miles de años después de que entraron a América del Norte a través de un puente terrestre que una vez unió a Siberia con Alaska.

”Muchos elogios deberían ir a estos europeos del norte por ser la primera sociedad humana en atravesar el Atlántico”, dijo el geocientífico Michael Dee, de la Universidad de Groninga en los Países Bajos, quien codirigió el estudio publicado en Nature.

Una imagen microscópica de un fragmento de una de las maderas examinadas por los investigadores en Canadá (Petra Doeve via The New York Times)
Una imagen microscópica de un fragmento de una de las maderas examinadas por los investigadores en Canadá
.

El equipo dirigido por Michael Dee y Margot Kuitems, del Centro de Investigaciones Isotópicas de la universidad holandesa de Groningen, halló un método original para sortear ese problema. La Tierra sufre constantemente la llegada de radiaciones cósmicas, que en su mayoría son rechazadas por su campo magnético.

Esos fenómenos a veces son tan importantes que provocan un aumento de la presencia del isótopo carbono 14 en la atmósfera.

Un estudio japonés detectó dos esos fenómenos de origen cósmico, uno en el año 775 y otro en 993. Ahora bien, esa brusca elevación del carbono 14 deja huella en los árboles, conocidos por su capacidad de absorber carbono.

Los científicos buscaron, con la ayuda de un espectómetro de masa, rastros de rayos cósmicos en tres fragmentos de árboles que fueron localizados en el campamento vikingo en Terranova.

Reconstrucción del asentamiento vikingo de L'Anse aux Meadows, en el nordeste de Canadá
Reconstrucción del asentamiento vikingo de L’Anse aux Meadows, en el nordeste de Canadá
.

Esos fragmentos habían estado en contacto con herramientas de hierro, según los estudios previos. La datación tradicional con carbono 14 dictaminó que su antigüedad oscilaba entre los años 1019 y 1024.

Posteriormente se examinó los anillos de esos fragmentos, y detectaron qué anillo mostraba un exceso de carbono 14. El conteo de anillos permite determinar con gran exactitud la edad del árbol.

La técnica reveló que el anillo con más “carga” de carbono 14 correspondía al año 993. Y contando los anillos restantes hasta la corteza, se pudo determinar en qué año el árbol fue talado, explicó a la AFP la científica. Resultado: 1021.

El método de rastreo de rayos cósmicos es una técnica con gran potencial, cree Kuitems, que considera que puede servir “para solventar interrogantes históricos”.

El Centro de Investigaciones Isotópicas ya pudo establecer en 2020 la edad de una estructura arqueológica en el sur de Siberia gracias a esta técnica, que detectó los rastros de la radiación cósmica que afectó a la Tierra en 775.

Los vikingos eran marineros de regiones escandinavas, actualmente Noruega, Suecia y Dinamarca. Se aventuraron por Europa, a veces colonizando y otras veces comerciando o saqueando. Poseían extraordinarias habilidades para la construcción de barcos y la navegación y establecieron asentamientos en Islandia y Groenlandia.

Reconstrucción del asentamiento vikingo de L'Anse aux Meadows, donde se llevó a cabo el estudio publicado en Nature
Otra imagen de la reconstrucción del asentamiento vikingo de L’Anse aux Meadows
.

”Creo que es justo describir el viaje como un viaje de descubrimiento y una búsqueda de nuevas fuentes de materias primas”, dijo Dee. “Muchos arqueólogos creen que la principal motivación para buscar estos nuevos territorios fue descubrir nuevas fuentes de madera, en particular. En general, se cree que partieron de Groenlandia, donde la madera adecuada para la construcción es extremadamente rara”, añadió.

La era vikinga se define tradicionalmente como del 793 al 1066 después de Cristo, presentando un amplio rango para el momento del cruce transatlántico.

VIALa Nación - Nature