La fiscal Donata Costa de la séptima sección penal de Milán pidió cuatro años y seis meses de prisión para el empresario ítalo argentino Paolo Rocca, acusado junto a su hermano y otro socio más del Grupo Techint de pagar sobornos para ser beneficiados con obras en Brasil.
Los directivos están acusados de pagar una cifra cercana a los 6,5 millones de euros entre 2009 y 2013, al ex gerente de Petrobras, Renato Duque, para que los beneficie con contratos de la petrolera pública brasileña por más de 1.400 millones de euros.
La periodista Emilia Delfino publicó en el Diario.Ar y en twitter que Paolo Rocca, Gianfelice Rocca y Roberto Bonatti podrían recibir una condena que en Italia los dejaría en prisión efectiva, aunque por su edad podrían evitarla.
Renato Duque ya fue juzgado y reconoció recibir dichos pagos ante la justicia brasileña.
La fiscal Costa además apuntó a San Faustin, la sociedad holding del grupo Techint manejada por los Rocca y Bonatti (primo de Rocca), con 1.239.200 euros, y solicitó que ordenen el decomiso de 6.592.891 euros, “suma correspondiente al dinero entregado al funcionario público (Duque)».
La fiscal Costa habló de los supuestos cómplices de los tres empresarios acusados y los definió como miembros de “grupos criminales que operan en varios estados”: Italia, Suiza, Argentina y Brasil. Identificó en el “grupo 1 brasileño” a Duque y quienes lo ayudaron a montar una estructura offshore para canalizar los pagos de Techint y blanquear el dinero.
En el “grupo 2 argentino/uruguayo”, la fiscal señaló la participación central de Héctor Alberto Zabaleta, ex director de Administración de Techint en Buenos Aires y uno de los hombres de mayor confianza de la familia Rocca; además de otros dos hombres públicos de la multinacional ítalo-argentina, el uruguayo Enrico Fabián Repetto Mariño y el abogado de Techint en Argentina, Fernando Mantilla.