Los gobiernos de los países de la Unión Europea (UE) y los eurodiputados llegaron a un acuerdo sobre nuevas normas. Impondrán a los gigantes tecnológicos (Google, Amazon, Apple, Meta y Microsoft) una mayor vigilancia sobre los contenidos ilegales en sus plataformas, y el pago de una tasa a los entes reguladores que supervisan su cumplimiento.
El acuerdo se produjo tras más de 16 horas de negociaciones. La Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés) es el segundo aspecto de la estrategia de la jefa antimonopolio de la UE, Margrethe Vestager, para frenar a la unidad de Alphabet Google-, Meta y otros gigantes tecnológicos estadounidenses.
«Tenemos un acuerdo sobre la DSA: la Ley de Servicios Digitales se asegurará de que lo que es ilegal en el mundo real también se vea y se trate como ilegal online», dijo Vestager en un tuit.
Con la DSA, las empresas se enfrentarán a multas de hasta el 6% de su volumen global de negocios por infringir las normas, mientras que las infracciones reiteradas podrían suponer la prohibición de hacer negocios en la UE.
Las prácticas en la mira de la UE
Las nuevas normas prohíben la publicidad dirigida a los niños o basada en datos sensibles como la religión, el sexo, la raza y las opiniones políticas. También se prohibirán los «patrones oscuros» (“dark patterns”), que son tácticas que engañan a los usuarios para que den datos personales a las empresas en línea.
Las empresas también se enfrentarán a una tasa anual de hasta el 0,1% de los ingresos netos anuales en todo el mundo para cubrir los costos de supervisión de su cumplimiento, lo que podría suponer entre 20 y 30 millones de euros anuales para la UE.
El mes pasado, el bloque de 27 países y los legisladores comunitarios respaldaron las normas históricas de Vestager, denominadas Ley de Mercados Digitales (DMA), que podrían obligar a Google, Amazon, Apple, Meta y Microsoft a cambiar sus principales prácticas comerciales en Europa.