Para no aburrir a los lectores -quienes están en las finanzas o en la especulación ya las habrán seguido hora a hora- recurrimos al resumen de Ariel Cohen, editor de Finanzas y Mercados de El Cronista:
«Jueves sin divisas. Se puso ardua la tarde para procesar el pequeño «paquete» de medidas del equipo económico para frenar al dólar…
Repasemos: una flexibilidad del cepo que había pedido la industria para poder completar importaciones en tránsito acordadas con antelación a la obligatoria financiación a 180 días para determinados rubros.
La más relevante, un tope al contado con liquidación por la vía de límites a la tenencia de Cedear para las empresas en u$s 100.000 como condición para acceder al MULC y una traba para hacerlo de 180 días si en el medio se operó con esos certificados.
Finalmente, en lo que quedó como la decisión más resonante, pero tal vez menos eficaz, se habilitó un circuito para que los turistas puedan ir con u$s 5000 en el bolsillo a casas de cambio y bancos para comprar pesos a la cotización MEP. Los agentes financieros podrán darse vuelta y comprar dólar MEP a las 48 horas.
No se explicó aún qué pasará con los pesos que no gasten los turistas, si es que van a poder recomprar sus dólares al salir del país.
El contexto de restricción de divisas sigue complicado, y la política no parece acusar recibo suficiente. Coincidente con estas medidas que buscaban tranquilizar al mercado, el dólar MEP se disparó 7,5% a $ 326,09 y el contado con liquidación vía bonos aumentó 9,4%, a $ 337,63. A través de Cedear, por su parte, avanzó 7,1% hasta $ 333,73.
El blue no frenó, y llegó a un récord de $ 336, y la brecha con el mayorista supera 160%, mientras el Banco Central tuvo que vender u$s 40 millones para las importaciones de energía, y la luz al final del túnel para las reservas dista de estar a la vista.»