La Losa de Saint-Bélec, un mapa de hace 4000 años

Investigadores de la Universidad de Bretaña Occidental, Francia, dieron a conocer los últimos datos que arrojaron sus análisis acerca de la tabla conocida como “Losa de Saint-Bélec”, del cual su origen se remonta a la Edad de Bronce, unos 4000 años atrás. Fue descubierta hace 100 años pero quedó, hasta el 2014, abandonada en un sótano. Desde entonces, desvela a los arqueólogos.

Según coincidieron los científicos de la mencionada academia, que estudiaron de manera preliminar la piedra, junto con otros colegas del Instituto Nacional de Estudios Arqueológicos Preventivos de Francia y la Universidad de Bournemouth, señalaron en 2021 que se trataría de un mapa, el más antiguo de Europa, con el que se conduciría a un tesoro.

La losa de Saint-Bélec pesa una tonelada y media, y mide un metro y medio de largo
La losa de Saint-Bélec pesa una tonelada y media, y mide un metro y medio de largo(Fuente: Denis Glicksman, Inrap)

La tabla, que pesa una tonelada y media y mide 1,5 metros de largo por 1,8 metros de ancho, tiene grabadas diferentes formas en su superficie, con relieves y marcas que simularían montañas y ríos. Yvan Pailler, de la primera universidad nombrada, señaló: “Usar el mapa para tratar de encontrar sitios arqueológicos es un gran enfoque. Nunca trabajamos así. Es un mapa del tesoro”.

El estudio reveló que el presunto mapa se basa en una superficie de 30 x 21 kilómetros, lo que tomaría casi dos décadas abarcar esa área para investigar en profundidad. Sin embargo, el equipo de arqueólogos, que también incluye al colega de Yvan, Clement Nicolas, del Instituto CNRS, no se dará por vencido. Asimismo, aseguraron que la precisión de la superficie recreada es de un 80% en comparación con los mapas actuales.

La piedra hallada tiene marcas talladas correspondientes a la geografía de Roudouallec, parte de la región de Bretaña occidental
La piedra hallada tiene marcas talladas correspondientes a la geografía de Roudouallec, parte de la región de Bretaña occidental(Fuente: Universidad de Western Brittany)

La piedra fue descubierta en el túmulo de Saint-Bélec, una fosa prehistórica en Leuhan, Francia, en el 1900, por Paul du Châtellier, un historiador local que, sin entender a qué se referían aquellos símbolos impresos allí, la abandonó en el sótano de su castillo hasta que sus hijos la vendieron en 1924 al Museo Arqueológico Nacional. En aquel sitio permaneció en el olvido durante casi 100 años, hasta su salvataje en 2014. Acerca de la región a la que se refieren las marcas talladas allí, serían de la región de Bretaña, a unos 500 kilómetros de París.

La losa presenta una rotura en la parte superior, por lo que se supone que se partió al momento de enterrarla. De no ser por ello, mediría unos 3,9 metros. En cuanto a su material, es de esquisto gris azulado, un tipo de piedra procedente de afloramiento rocosos del Precámbrico cercanos a la localidad de Douarnenez.

“Todavía tenemos que identificar todos los símbolos geométricos, la leyenda que los acompaña”, sostuvo Clement Nicolas al tiempo que su colega, Yvan Pailler, remarcó: “Estamos intentando contextualizar mejor el descubrimiento, encontrar una forma de fechar la losa”.

Analizar y comprender los terrenos a los que se refiere específicamente el mapa llevaría dos décadas, advirtieron los investigadores
Analizar y comprender los terrenos a los que se refiere específicamente el mapa llevaría dos décadas, advirtieron los investigadores(Fuente: Denis Glicksman, Inrap)

Además, desde la universidad afirmaron que se estarían realizando excavaciones en sitios específicos en donde se encontró la pieza, con el motivo de hallar alguna referencia hacia la misma. En especial en el valle del Odet.

Los investigadores aludieron que las líneas marcarían una parcela de terreno, con túmulos, campos y asentamientos, lo que significaría la precisión de un presunto rey o jefe de la Edad de Bronce. Lo cierto es que, a causa de revueltas o rebeliones, la comunidad habría quedado disuelta y la placa fue utilizada como material de construcción, antes de que fuera enterrada por siglos.

 

VIALa Nación