A diferencia de lo que sucedió durante los gobiernos de Mauricio Macri y Alberto Fernández, que se tomaron varias semanas para definir cambios en el top management y en la línea técnica de YPF, Javier Milei ya validó la designación de Horacio Marín, actual director de Exploración y Producción de Tecpetrol, como nuevo presidente y CEO de la petrolera bajo control estatal, según confirmaron.
Marín viene colaborando desde hace tiempo con los equipos técnicos de La Libertad Avanza que coordina Nicolás Posse. Fue, de hecho, uno de los primeros en sumarse a ese espacio, incluso desde mucho antes de que Javier Milei sea competitivo en términos electorales.
La primera novedad de la decisión de LLA es precisamente la reunificación de ambos cargos, que hoy están en cabeza de Pablo González y Pablo Iuliano, respectivamente. La estrategia prevé la modificación del estatuto de la compañía —un paso de sencilla concreción, dado que sólo requiere de una aprobación del Directorio— para permitir que Marín ejerza ambas posiciones. Implicará, en los hechos, un retorno al modelo de gestión aplicado entre 2012 y 2015 durante la gestión liderada por Miguel Galuccio.
Algunas versiones periodísticas comentaban ayer la posibilidad de que Javier Iguacel, ex ministro de Energía e intendente de Capitán Sarmiento, asuma como presidente del Directorio de YPF, pero esa alternativa fue desestimada por las fuentes consultadas por este medio. «Javier puede asumir como funcionario en otra área, pero no en YPF», indicaron. También trascendió que Matías Tamburini, un ex Deutsche Bank, asumiría como director financiero (CFO), pero finalmente su designación no fue validada por la conducción de LLA.
La designación de Marín se oficializará mañana miércoles al mediodía, una vez que el directivo de Tecpetrol se despida de su equipo de colaboradores en la empresa del Grupo Techint.
Perfil petrolero
Ingeniero químico egresado de la Universidad de La Planta, con un posgrado en Petróleo en la Universidad de Texas y otro en Stanford, Marín realizó casi toda su carrera profesional en Tecpetrol, a donde ingresó en 1988, hace más de 35 años, como reservorista. Pragmático y directo a la hora de liderar, Marín es hoy la persona de confianza de Paolo Rocca, líder de Techint, cuando hay que discutir cuestiones vinculadas a la explotación técnica de un yacimiento y a todo lo que sucede en el subsuelo hidrocarburífero.
Fue, en ese sentido, uno de los factótums de la construcción en tiempo récord de Fortín de Piedra, el mayor yacimiento de shale gas del país, que cambió la perspectiva gasífera de Vaca Muerta con pozos que superaron las expectativas que existían en la industria. Antes había encabezado la explotación de El Tordillo, uno de los yacimientos convencionales de crudo en el Golfo San Jorge, ya en etapa de declinación, y también fue responsable, en el plano operativo, de la expansión de Tecpetrol en América latina.
Su llegada a YPF fue recibida de forma positiva por la mayoría de los altos directivos de la industria consultados. “Es una persona práctica, en lo técnico es muy sólido. Tendrá que darse el espacio para conocer YPF y otro para maniobrar con la política. Su primer desafío será arreglar los precios relativos de los combustibles y a la brevedad para no tener otra crisis (de abastecimiento)”, reflexionó un encumbrado ejecutivo del sector que conoce a la perfección el entramado de poder que existe en el piso 32 de la torre de Puerto Madero. El tiempo, en este contexto, no es lo que abunda. Marín deberá imbuirse rápido en la agenda de la petrolera y empezar a tomar decisiones cuanto antes.