Argentina es la única de los tres grandes naciones “sojeras” del mundo que, lejos de promover el consumo interno de biodiésel para consolidar el autoabastecimiento energético, viene implementando en los últimos años políticas para perjudicar a la actividad.
Hilarión del Olmo, presidente de la fábrica de biodiésel Explora SA, realizó un repaso de la gestión de la última secretaria de Energía, Flavia Royón, para llegar a la conclusión de que fue una verdadera calamidad para el sector.
“A nivel secretarios de Energía, el porcentaje de corte real de la gestión de Flavia Royón fue de 5,2%. El segundo porcentaje de corte real más bajo desde el inicio de la obligación efectiva de mezcla (marzo de 2010)”, indica el informe referido a la gestión comprendida entre el 8 de agosto de 2022 y el 10 de diciembre de 2023.
Flavia Royón tuvo una eficiencia del 68,9% en el cumplimiento del corte obligatorio, el segundo nivel más bajo de la seria histórica, superado solamente por la gestión de Darío Martínez con el 55,8%.
“En los 426 días de la gestión de Royón –contados desde el 1 de septiembre de 2022 desde hasta 31 de octubre 2023 (último dato disponible, empeorará cuando se conozcan los números de noviembre 2023) se entregaron 345.060 toneladas menos de biodiésel que lo asignado”, señala Del Olmo.
El presidente de Explora remarca que entre el 8 de agosto de 2022 y el 29 de noviembre de 2023 Royón firmó cinco resoluciones que modificaron el precio del biodiésel destinado al corte obligatorio sin aplicar la fórmula de precio que considerara los costos de elaboración del producto, lo que incumple la Ley 27.640.
El informe señala que en 2015 –último año de administración de Cristina Fernández de Kirchner– el consumo en el mercado interno de biodiésel fue de 1.014.363 toneladas con un corte obligatorio del 10% que en términos efectivos se ubicó en 8,3%.
En 2019 –último año de administración de Mauricio Macri– el consumo en el mercado interno de biodiésel fue de 1.126.468 toneladas con un corte obligatorio también del 10% y uno real del 9,2%.
“Por lo tanto, medido el resultado del año 2023, contra el año 2015 el consumo de biodiésel en el mercado argentino se contrajo un 37,8% o 383.238 toneladas menos; y contra 2019 se redujo en un 43,9% o 495.343 toneladas menos”, apunta el documento.
“Para contrastarlo con lo ocurrido en el mercado de biodiésel en otros países: en EE.UU. en 2015 el consumo fue de 6.995.437 toneladas y en 2022 pasó a 9.993.482 toneladas; en Brasil en 2015 fue de 3.521.000 toneladas y en 2022 se ubicó 5.476.630 toneladas”, resume.
Comentario de AgendAR:
Olvidate del mercado interno y de la Ley de Corte. Como valor agregado, exportar aceites y harinas de soja no es gran cosa, pero es un negocio mucho mayor que el del corte local, y ahora impositivamente tiene iguales retenciones que exportar porotos.
Daniel E. Arias