En la Universidad de Córdoba diseñaron un generador eléctrico portátil

La principal inspiración para Alexis Tapia llegó de la mano de un problema. Todos los veranos, por el aumento del consumo de energía eléctrica, los cortes de luz son comunes en Río Segundo, su ciudad natal. Más de una vez se quedó sin servicio, y sin ventilador.

Pero este estudiante de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño (UNC) de 35 años reconoce que la idea también se gestó andando. Amante del trekking, Alexis se encontró más de una vez en parajes recónditos en medio de la montaña, sin batería para recargar su linterna frontal.

Para coronar su gesta, en pandemia, ideó junto a un compañero un generador portátil para abastecer de energía a una carpa sanitaria. “La idea era tener un espacio en el que el servicio no se cortara. Uno podría pensar que los generadores y los paneles ya están inventados. Pero lo nuevo de nuestro invento fue poderlos trasladar. Aprovechar, por ejemplo, el viaje en ambulancia para recargar el generador y enchufarlo en una carpa o en un respirador”, cuenta Alexis.

Los tres eventos (cortes de luz, caminatas por las sierras y pandemia) le valieron de inspiración para el proyecto que presentó en la edición 2023 de “UNC Innova”, una exposición organizada por la Secretaría de Innovación y Vinculación Tecnológica de la Universidad Nacional de Córdoba.

Cómo funciona

Este generador eléctrico móvil acumula energía y se abastece a través de distintos tipos de almacenamiento.

Puede conectarse a un automóvil y utilizar la energía cinética del movimiento del vehículo para generar electricidad. También puede abastecerse del sistema energético de una vivienda, tenga o no energía fotovoltaica.

“Si en una casa hay paneles solares que producen energía renovable, el aparato que inventé se conecta a la red de electricidad de esa vivienda y se retroalimenta. Cuando se desenchufa y se lleva, por ejemplo, a una casa de campo, se conecta a esa red y le da la energía que almacenó. Es como si se le sacara sangre a una persona para darle a otra”, ejemplifica.

Al ser bidireccional, se puede alimentar de un sistema de energía eléctrica convencional, no renovable. El generador fue creado con un dispositivo que se adapta a cada tablero. También previene desperfectos de aparatos eléctricos por baja de tensión. En el caso de un auto, se conecta a la toma a 12 voltios.

Alexis señala que un viaje de una hora (por ejemplo, de Río Segundo a Villa María) puede generar entre 30 a 45 minutos de energía gratis para una vivienda.

Impacto en la huella de carbono

Inspirado en la bioarquitectura y en los principios de la sustentabilidad, Alexis construye su casa en Pilar –una localidad contigua a Río Segundo- mediante el sistema steel frame. En su propio hogar pone en práctica sus estudios para crear una refrigeración y calefacción pasiva, sin utilizar tanto el aire acondicionado o un calefactor.

Con la misma idea se propuso reducir la huella de carbono, a través de su nuevo invento. Por un lado, reduce el consumo de energía convencional no renovable. Por otro, permite obtener un rédito de la contaminación que genera un vehículo. “Un auto que funciona a combustible genera emisiones y despide dióxido de carbono. Mediante la utilización de este aparato, se puede obtener la energía que almacenó el generador. No evita la contaminación, pero queda una ganancia”, sostiene el estudiante.

Posibles usos

Si bien la idea original fue llevar energía a lugares remotos, con el tiempo Alexis se dio cuenta de que la mayor necesidad estaba en las grandes ciudades. La pandemia demostró que un corte de luz podía afectar el funcionamiento de un respirador, y conoció la realidad de gente electrodependiente, que depende de un artefacto eléctrico para sobrevivir o mantener calidad de vida.

“Si quisiéramos llevar energía a un campo, podríamos tranquilamente conectar el generador a un tractor, almacenar y darle luz a un sitio que no cuenta con el servicio”, agrega. Esta propuesta puede ser utilizada en cualquier lugar donde se utilicen vehículos y exista la necesidad de disminuir la contaminación ambiental. También en lugares donde la red eléctrica es inestable o inaccesible, permitiendo el acceso a la energía mediante una fuente renovable y sostenible.

En la actualidad, Alexis usa su generador para llevar energía a obras en construcción, en sitios que aún no cuentan con el servicio. Y también lo prueba en su propia casa, en proceso de edificación.

En la feria de la UNC obtuvo excelentes comentarios. El proyecto espera financiamiento para ser probado y lanzado al mercado.

El proyecto

Nombre: Generador eléctrico solar para automóviles con almacenamiento de energía y conexión domiciliaria.

Autor: Alexis Tapia, estudiante de cuarto año de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la Universidad Nacional de Córdoba.

El ahorro en números: un viaje de una hora aproximada (por ejemplo, de Río Segundo a Villa María) puede generar entre 30 a 45 minutos de energía gratis para una vivienda.

Por Natalia Lazzarini (UNCiencia)

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