El Ministro Caputo anunció que el crédito con el FMI que se venía negociando alcanza un monto de U$S 20. 000.millones y que estos recursos son de “libre disponibilidad”, lo que de por si contradice el DNU 179/25 del Gobierno Nacional que afirma que el mismo se destinará a la cancelación de las Letras Intransferibles en dólares estadounidenses en poder del Banco Central y a los vencimientos del Programa de Facilidades Extendidas de 2022 que operan hasta 2029 y suman U$S 14.000 millones. El argumento de la cancelación de las Letras Intransferibles había sido utilizado por el Gobierno para sostener que el crédito del FMI no constituía un nuevo endeudamiento sino la cancelación de un compromiso del Tesoro con el BCRA, que mejoraba la calidad de sus activos sin incremento de la Deuda Global.
El Ministro mencionó que adicionalmente se sumaran fondos del Banco Mundial, del BID y de la CAF también de “libre disponibilidad” con el mismo fin de fortalecer las Reservas del Banco Central para llevar las mismas hasta U$S 50.000 millones, jactándose de que se lograrìa un nivel de cobertura de los recursos monetarios superior a la de la Convertibilidad.
Los dichos de Caputo y los posteriores del Presidente Milei suponen un gran volumen de dólares que ingresan a las arcas del Banco Central provenientes del FMI y de los organismos multilaterales debido a la “excepcionalidad” de la Argentina, que como ya realizó el ajuste que solicita el FMI no necesita ser sometida a condicionalidades para su obtención. Suponen que el atraso cambiario puede ser obviado ante semejante erogación que mostraría Reservas robustas y solvencia.
Los dichos de Julia Kozack, portavoz del FMI contradicen esta afirmación al sostener que los desembolsos serán por tramos como es habitual para el FMI y a lo largo del Programa, sin definir monto y con la norma de “mantener políticas fiscales, monetarias y cambiarias coherentes”
Si el deseo del Gobierno es un aluvión de dólares para sostener el atraso cambiario y continuar con el carry trade del arbitraje de la tasa de interés contra la devaluación del 1 por ciento mensual comete un grave error, las expectativas de los operadores financieros ya no son las mismas.
No parece claro que esa fantasía del Gobierno de Reservas por 50.000 millones de dólares vaya a convalidarse. El FMI debiera adelantar los vencimientos de cuatro años futuros¡!!!!!!!!!!!!!! 14.000 millones!!!!!
Y para que necesiten ese financiamiento de libre disponibilidad pagando tasa de interés, si no es para afrontar la dolarización de los Fondos, sociedades, empresas y particulares colocados en pesos luego de vender sus dólares al calor de la timba financiera. Ya lo hizo Caputo con el Gobierno de Macri en 2018, lo quiere volver a hacer.
Si eso ocurre cada nuevo pago futuro al FMI implicarà un nuevo endeudamiento si realmente permite de manera cómplice que se la fumen toda.
Eso es indignidad.
Pablo Tonelli, economista