La cadena de hostels Selina nació en Panamá por inspiración de dos israelíes que viajaban por el mundo. A ellos se les ocurrió implementar un sistema de hospedaje acorde con las necesidades de los viajeros jóvenes, también conocidos como millennials (nacidos entre 1980 y 2000).
- La cadena llegó a la Argentina y prevé la apertura de su primer primer establecimiento en el barrio de Palermo Soho.
El formato del negocio es el de ofrecer alojamiento tanto en habitaciones compartidas (hasta 14 camas) como también en cuartos privados de lujo, al estilo de los hoteles boutique. Ambas posibilidades se unen al uso de áreas comunes que pretenden enriquecer «la experiencia» de los huéspedes nómadas.
«Buscamos oportunidades de hoteles para reconvertir. Lo hacemos en un lapso de 90 o 120 días», explica Fernando Bigio, gerente de Argentina y Brasil, de la cadena. «Les ofrecemos alquilarlos e invertimos entre 500 mil y un millón de dólares en cada uno, para adaptarlo, haciendo foco en los espacios comunes y el diseño», cuenta. De hecho, convocamos a artistas locales para que pinten murales en todos los cuartos», cuenta el directivo. La firma opera todos los servicios del hostel, en una proporción que le genera ingresos similares de los del hospedaje.
La cadena tiene hasta ahora 31 propiedades en 9 países y otros 38 inmuebles en reforma.
En Argentina, la primera apertura de Selina será -a mediados en diciembre- en el barrio porteño de Palermo Soho, donde hasta ahora existía el ex Hotel Esplendor- La propiedad tiene cerca de 3.000 m2 y ofrecerá unas 200 camas, por las que los viajeros pagarán desde 12 o US$15, hasta US$ 150 el cuarto de lujo.
La cadena tiene cerrada otra operación en Córdoba. «En los próximos 4 años esperamos abrir entre 13 y 15 hoteles en los destinos turísticos más destacados del país incluyendo otra apertura en Buenos Aires y en ciudades como Mendoza, Salta, Rosario, Mar del Plata, El Calafate, Ushuaia, Bariloche, Iguazú; con una inversión aproximada de US$15 millones».