El gobierno dispuso por decreto que la Dirección General de Fabricaciones Militares se transforme en Fabricaciones Militares Sociedad del Estado, bajo el régimen de la Ley 20.705. Tendrá por objeto «la investigación y desarrollo de tecnologías, fabricación, industrialización, explotación y transporte, así como la comercialización de bienes y servicios en las áreas de seguridad, defensa, minería, industria química e industria». metalmecánica».
El gobierno afirma que la ahora ex Dirección Nacional de Fabricaciones Militares, creada hace 77 años, «tiene sistemáticos y recurrentes problemas de competitividad, así como serias dificultades económicas y financieras que derivan en conflictos para acceder competitivamente a los sectores público y privado, y costos excesivos con la consecuente necesidad de disponer de cuantiosas partidas presupuestarias en cada ejercicio anual».
En lo que aparece como un punto clave, el decreto fija un plazo de 180 días, a partir del 1° de febrero, para iniciar las negociaciones de un Convenio Colectivo de Trabajo para su personal.
En diciembre pasado, trabajadores de la Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán realizaron una protesta frente a la planta para denunciar el despido de 26 empleados. Además, se denunció que en agosto pasado echaron a 49 personas de esa misma planta. Desde ATE se informa que la administración actual redujo más del 50% de la planta y que la producción disminuyó entre 80% y 90%.
La Dirección General de Fabricaciones Militares fue una creación del general e ingeniero militar Manuel Savio, entre 1938 y 1942, para impulsar una industria pesada nacional, ante las circunstancias de la Segunda Guerra Mundial. Fue un factor decisivo en las industrias para la defensa, en la incorporación de tecnología en una multitud de rubros, y en transformación de la provincia de Córdoba, hasta 1980. Luego, su historia fue similar a la del deterioro de buena parte de la industria argentina.