Debido a la peor sequía de los últimos 50 años, la reducción de las cosechas generará también un fuerte impacto en el transporte de granos.
Según la estimación de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), se prevé que la carga transportada durante 2018 se reduzca en 20 millones de toneladas. Esto significaría unos 700 mil camiones menos que viajarán desde los campos hacia los puertos.