Ante la anunciada autorización del Fondo Monetario de utilizar parte de su préstamo para las subastas de dólares que se harán a partir de abril a fin de contener su alza, la opinión generalizada en la oposición es que se trata de una medida con un fin puramente electoral: evitar que el «termómetro» que mide la preocupación y el temor de los sectores medios -el precio del dólar- se dispare otra vez.
Lo más suave que dijeron, en privado, los economistas de ese sector consultados, es que era una medida irresponsable.
El Presidente de la Comisión de Economía del PJ nacional, lic. Guillermo Moreno, anunció que reiteraba la nota que envió a la Directora Gerente del FMI, Christine Lagarde, en septiembre pasado. «Las circunstancias son las mismas, agravadas. No hay otro crédito internacional para la Argentina; la situación económica y social es más grave, y las elecciones son más cercanas. Nuevamente, propongo que el Lic. Pablo Challú, el Dr. Rafael Perelmiter y el Lic. Guillermo Nielsen, de la Comisión que presido, se reúnan con el staff del F.M.I. antes que se tomen medidas que producirán un daño irreparable».
Esta es la copia de la nota enviada en septiembre y que ahora se reitera: