El premio al mejor invento patentado en los últimos cinco años en Latinoamérica fue para un descubrimiento del INTA: los nanoanticuerpos de llamas, capaces de neutralizar variantes del rotavirus que producen diarreas. El hallazgo fue patentado en 2017 en el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI) y fue uno de los seleccionados por esa entidad para concursar. Como parte del premio, la investigación participará en la Exposición Internacional de Invenciones de Ginebra, organizada por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual.
Los VHH o «nanoanticuerpos de llama» son unas moléculas derivadas de los anticuerpos de los camélidos. Son las más pequeñas que existen en la naturaleza y tienen la capacidad de reconocer específicamente a otra molécula y enlazarse a ella. Se trata de una tecnología que está por revolucionar la industria de anticuerpos monoclonales a escala mundial.
“Nuestro sueño es salvar vidas con este desarrollo y esta patente”, indicó Celina Vega, investigadora del Laboratorio de Virus Diarreicos del INTA e integrante del equipo que estudia los VHH de llamas. “Nosotros hace 10 años que estamos investigando y trabajando con esta molécula y lo hacemos desde una institución del Estado”.