En Río Negro se dio ayer la segunda etapa provincial de las elecciones generales 2019, en un escenario que estuvo marcado por la judicialización de la candidatura del actual gobernador Alberto Weretilneck (inhabilitada por la Corte Suprema), y donde la disputa estuvo centrada entre el oficialismo provincial, representado por Arabela Carreras (antes candidata a vice de Weretilneck), y el Frente para la Victoria, con Martín Soria a la cabeza.
Juntos Somos Río Negro, el frente que armó el oficialismo provincial, obtuvo un rotundo 52,49% de los votos. Así Arabela Carreras será la 1ra. gobernadora de Río Negro. Esto confirma que una clara mayoría de los ríonegrinos tienen una opinión muy positiva de la gestión de Weretilneck, un gobernador que mantuvo una buena relación con el gobierno nacional.
El peronista Martín Soria, que llevó la familiar sigla del FpV, es el segundo candidato más votado, con un 35,08%.
Cambiemos, que llevó a Lorena Matzen como líder de la fórmula, tuvo un resultado muy pobre – 5,67%- y fue la primera en reconocer el triunfo de Carreras. Como en la elección de Neuquén del 10 de marzo, la Casa Rosada prefiere el voto útil. Es decir, que Matzen se desinfle para ayudar al triunfo de la candidata del actual gobernador, un buen aliado de Mauricio Macri. Y bloquear el posible del FpV, una imagen que en el camino a octubre el Gobierno nacional prefiere evitar.
En la infografía de abajo, se muestran los porcentajes que esas tres fuerzas obtuvieron en las elecciones provinciales de hace 4 años, en 2015 -aproximadamente similares a las actuales- y los significativos cambios en sus resultados en las PASO y las legislativas de 2017. Creemos que son un buen dato para medir sus estrategias y la realidad rionegrina.