El Banco Central de Brasil mantuvo ayer miércoles, en una decisión unánime y por décima vez consecutiva, la tasa básica de interés en el 6,5 %, su menor nivel histórico y un porcentaje que era previsto por el mercado financiero. Nuestro BCRA, ayer la bajó nuevamente a… 65,441%. Diez veces más.
Para su decisión, el Comité de Política Monetaria (Copom) del emisor brasileño señaló que tuvo en cuenta «los indicadores recientes de la actividad económica» del país, que apuntaron una «interrupción del proceso de recuperación de la economía» del gigante suramericano en los últimos trimestres.
El único comentario que podemos hacer aquí es que, como Jair Bolsonaro no es más keynesiano que Mauricio Macri, y su ministro de Economía, Paulo Guedes, es un neoliberal mucho más consistente que el equipo que hemos tenido aquí los últimos años, la explicación es que los empresarios brasileños son menos… tímidos que los nuestros.