En mayo de 2015, se presentó en La Matanza el proyecto del Sero Electric, un auto eléctrico de producción nacional, que inicialmente nació para ser utilizado en espacios cerrados. Más de cuatro años después, en el parque industrial de Morón, se hizo la presentación: el Sero Electric homologado: es el primer auto eléctrico fabricado en la Argentina, que ahora está autorizado para circular por calles y rutas.
En este tiempo, la empresa fundada por el empresario Pablo Naya –dueño de concesionarios Peugeot-Citroën-, que decidió crear su propia automotriz local.
“Argentina no es un país sencillo para construir y hacer cosas. Pero acá estamos, con una planta que todavía nos está faltando terminar. Arrancamos en 2010, con un papel y un lápiz para ver lo que se venía: movilidad eléctrica y sustentable, que es lo que necesita este planeta para empezar a cuidarlo”, explicó Naya en la presentación donde se lanzó a la venta la versión Homologada del Sero Electric.
Por primera vez, el vehículo consiguió el permiso oficial para ser patentado, asegurado y circular por la vía pública.
Las reglamentaciones argentinas demandaron a la compañía cuatro años de trámites para conseguir la LCM (Licencia de Configuración de Modelo). Para lograrlo, fue necesario crear las categorías L6 y L7 (que ya existen en otros países), pero cuya ausencia impedía que en la Argentina circularan autos de este tipo. Un auto que se carga como un celular.
En el transcurso de estos años, Sero Electric no paró de producir. Los modelos se comercializaron para circular dentro de fábricas, aeropuertos, barrios privados y hasta para tareas de vigilancia en zonas peatonales. Debido a la demanda, la empresa se trasladó desde su sede original en Villa Luzuriaga a una planta más amplia y moderna en Moreno.
Durante la presentación, se anunció la expansión, con nuevos modelos destinados al transporte de productos. “Hoy contamos con doce personas dentro de la planta. Hasta ahora, el mercado era muy acotado. Sólo hemos producido 150 unidades. Ahora, con la Licencia de Configuración de Modelo que nos permitió homologarlo, podremos comenzar a proyectar otro panorama de crecimiento”, explicó Naya.
Los autos eléctricos son tan «verdes» como la red en la que se recargan. En un circuito eléctrico como el de Suecia (40% nuclear, 40% hidroeléctrico, 20% renovable), son muy poco contaminantes. En una red como la Argentina, dependiente casi en un 70% de centrales térmicas, en materia de emisión de carbono a la atmósfera SON contaminantes… pero lo hacen en otro lado, probablemente lejano al de circulación.
Y habida cuenta de la pésima calidad de aire en las 5 megalópolis argentinas, que la contaminación suceda en lugares relativamente despoblados no es poco decir, para un auto esencialmente urbano como el Sero. No salva al planeta, pero no contribuye a la notoria incidencia de enfermedades respiratorias de los argentinos.