El presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, presentaron ayer, como estaba previsto, la oferta de canje de deuda a los bonistas que tienen en su poder papeles soberanos argentinos. Estaban acompañados por la vicepresidenta, Cristina Fernández, en su primera aparición en público en varias semanas, el presidente de la Cámara Baja, Sergio Massa y los gobernadores de las provincias argentinas -en presencia o por videoconferencia.
Alberto Fernández agradeció la solidaridad que mostraron los gobernadores oficialistas, y los de la oposición, a quienes nombró uno por uno (ver video al final de la nota) y al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, a quien sentó a la izquierda. Esto es explicable: acompañaban la propuesta de la renegociación dura de una deuda contraída en su mayor parte por el gobierno de Cambiemos.
En líneas generales, se trata de una fuerte reducción de los intereses de los bonos y un período de gracia de tres años. La quita en términos de pago de capital es de unos u$s 3.600 millones, con una reducción de intereses del orden del 62%.
La propuesta engloba a 21 bonos nominados en dólares, euros y francos, emitidos bajo legislación extranjera, por un total de u$s 66.238 millones. La presentación oficial aclara que u$s 41.548 millones fueron emitidos en los últimos 4 años.
Los principales tenedores de esta deuda son los fondos Black Rock, Greylock, Fidelity, Templeton y PIMCO. La primera reacción de sus representantes locales fue encontrar que la oferta “no era tan mala” como indicaban los primeros trascendidos. Inmediatamente aclararon que esperan más detalles y que en estas condiciones “no parece aceptable”.
Bloomberg´, la agencia de noticias financieras que habitualmente expresa la opinión de los fondos de Wall Street, fue sucinta: » Unos15 años después de golpear a los inversores extranjeros con una de las renegociaciones de bonos soberanos más duras de la historia moderna, Argentina dio a conocer una propuesta para una nueva reestructuración de la deuda que parece ofrecer términos ligeramente más generosos».
La opinión de AgendAR sobre esta renegociación y su desarrollo futuro puede expresarse mejor en las conocidas palabras de un viejo político y literato inglés: «No es el final. Ni siquiera es el principio del final. Pero es el fin del principio».
Para acceder al texto oficial de la presentación reducida de la Propuesta de Reestructuración de la Deuda Externa Pública, cliquear aquí. En este video de 17 minutos están la exposición de Guzmán, y la introducción y cierre del presidente Alberto Fernández