Los primeros ministros de Polonia, Chequia (la República Checa) y Eslovenia llegaron a Kiev, capital de Ucrania, para reunirse con el presidente Zelenski en medio de la guerra que enfrenta su país contra Rusia y afirmar su apoyo a la resistencia que han mantenido durante estos 20 días de conflicto.
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, expresó desde Kiev su deseo de «poner fin a la tragedia» que vive Ucrania «lo antes posible», en un viaje conjunto con sus homólogos checo y esloveno, Pietr Fiala y Janez Jansa, a la asediada capital ucraniana.
El propósito del viaje, en tren y sin anuncio previo, era «confirmar el apoyo inequívoco de toda la Unión Europea (UE) a la soberanía e independencia de Ucrania y presentar un amplio paquete de ayudas». El viaje había sido acordado previamente en la cumbre informal de Versalles, en la que los líderes de la Unión Europea (UE) se reunieron el pasado viernes 11, según fuentes polacas.
(Un dato de valor simbólico pero importante: los tres países cuyos gobernantes viajaron están entre los miembros de la U.E. de origen e idioma eslavo, al igual que Ucrania, y Rusia).
El portavoz del Gobierno de Varsovia informó asimismo que, tanto el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, como representantes del gobierno de Estados Unidos, estaban al tanto de la visita. Según Varsovia, la delegación «representa de facto a la UE», pues cuenta además «con el consenso del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen«.
En un mensaje difundido a través de sus redes sociales, Morawiecki afirmó, ya en Kiev, que «esta guerra es el resultado de las acciones de un tirano cruel que ataca a civiles, bombardea ciudades y hospitales en Ucrania», en referencia al presidente ruso, Vladímir Putin. Al mensaje le acompañaban varias fotos de los líderes polaco, checo y esloveno, en ropa informal, y sentados juntos en una mesa con un mapa de Ucrania desplegado ante ellos.
En Twitter, el jefe del gobierno polaco agregó en inglés: «Aquí es donde se hace historia en la Kiev devastada por la guerra. Aquí es donde la libertad lucha contra el mundo de la tiranía. Aquí es donde el futuro de todos nosotros pende de un hilo».
Fuentes de las instituciones comunitarias, desde Bruselas, afirmaron estar «al tanto» del viaje, mientras que por parte del presidente del Consejo se subrayaron «los peligros de seguridad» que entrañaba la visita a la capital ucraniana, bajo el asedio de los ataques rusos.
Poco antes de la llegada de la delegación a Kiev, el portavoz del Gobierno polaco, Michal Dworczyk, subrayó que el viaje era «arriesgado», pero que «las circunstancias» exigían «sacrificios».
It is here, in war-torn Kyiv, that history is being made. It is here, that freedom fights against the world of tyranny. It is here that the future of us all hangs in the balance. EU supports UA, which can count on the help of its friends – we brought this message to Kyiv today. pic.twitter.com/Us7k9xTq5f
— Mateusz Morawiecki (@MorawieckiM) March 15, 2022