Según la encuesta online realizada por Fundación Huésped en colaboración con la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE) y la Universidad ISALUD, la opinión generalizada es positiva.
El estudio se realizó entre mayo y julio de 2021 y participaron 23.264 personas. El objetivo era identificar las actitudes y prácticas en relación con las vacunas del Calendario Nacional de Vacunación y las vacunas contra COVID-19 en la Argentina.
Los principales hallazgos de esta investigación revelaron que 7 de cada 10 personas dicen haber recibido todas las vacunas del calendario nacional. Asimismo, la encuesta informó que 9 de cada 10 personas tuvieron una intención positiva hacia la vacunación para prevenir el COVID-19.
En lo que respecta a las fuentes de información para tomar decisiones sobre la vacunación, un 66,1% de las personas encuestadas refirieron recurrir a la televisión. En segundo lugar, el 57,6% mencionó hacerlo a través de diarios y portales de noticias, mientras que un 24,2% indicó que consultó con médico/a de cabecera y un 31,4% con otros médicos, enfermeros, etc. (Por supuesto, estas fuentes de información no son excluyentes).
“El rol del personal de salud es clave en este sentido, son quienes pueden generar un vínculo de confianza con las personas y responder ante sus dudas y consultas. Sin ese intercambio, el éxito de una estrategia de vacunación es muy dificil” declaró Florencia Cahn, Presidenta de la Sociedad Argentina de Vacunología.
Sobre las personas que indicaron no haberse dado todas las vacunas (27, 8%), un 40,2% apuntaron que el motivo para no haberlo hecho fue que desconocían las vacunas que podrían aplicarse. Por otro lado, solo un 15,8% mencionaron que no quisieron darse la o las vacunas correspondientes.
En relación con este último punto, Virginia Zalazar, investigadora de Fundación Huésped a cargo del estudio, explicó que “Cuando se analizan las razones por las cuales aumenta la actitud negativa hacia las vacunas, aparece la preocupación sobre los riesgos o efectos a futuro” y concluye que “esto indica la necesidad de fortalecer la información sobre la seguridad y los beneficios de las vacunas”.