Con el 2024 en plena marcha y con un nuevo gobierno dispuesto a dar una lavada de cara a los lineamientos de Defensa, las Fuerzas Armadas evalúan con cautela como de desarrollarán los proyectos y actividades en el corto plazo. En el caso de la Fuerza Aérea Argentina nos referimos a las distintas iniciativas en curso, tanto en gateras como en ejecución.
Sin dar mayores rodeos, el proyecto más ambicioso continúa siendo la esperada definición política para formalizar e iniciar de una buena vez la compra de cazas multi-rol. A esta altura resulta innecesario hablar de candidatos, ya que el abierto alineamiento expresado por la actual administración, así como los diversos trascendidos de las últimas semanas y días apuntan a que el F-16 A/B MLU será el próximo caza de la Fuerza Aérea Argentina en el mediano plazo.
De concretarse la adquisición de los F-16 Fighting Falcon ofrecidos por Dinamarca, la Fuerza Aérea se verá obligada a desandar lo que será la incorporación de nuevas capacidades de todo tipo, iniciativa que también demandará considerables esfuerzos y tiempo en lo que refiere a inversión de recursos humanos, materiales y presupuestarios.
En paralelo a la definición de la compra de los F-16 A/B MLU, la Fuerza Aérea sostendrá aquellos proyectos que fueron concebidos para incorporar, recuperar y modernizar los medios que actualmente son de dotación de las unidades de caza y ataque. Esto incluye continuar con el proceso de recuperación y rotación de los A-4Ar Fightinghawk, la modernización de los Embraer EMB-312 Tucano e IA-63 Pampa, así como la incorporación de nuevos Pampa III Bloque II.
Transporte
Uno de los puntos altos destacados por la FAA en los últimos años fue la recuperación de sus capacidad de transporte, iniciativa que vio la llegada de un C-130H Hércules (TC-60), un B-737-700 (T-99), un Saab 340B y Hurón, así como la resucitación de los Fokker F-28. Estos últimos permitieron quitar cierta presión sobre la flota de Hércules, la cual quedó como la principal solución de transporte ante la baja transitoria de los bimotores neerlandeses.
Con el objetivo de continuar expandiendo su capacidad de transporte de pasajeros y carga, la Fuerza Aérea inició el proceso de compra por un Boeing 737-700QC, compra que quedó en pausa atento que los ofrecimientos recibidos no se amoldaron a los requerimientos iniciales. La FAA también avanzó en la adquisición de aviones de transporte mediano Embraer ERJ-140/145, iniciativa para la cual se llevaron adelante dos licitaciones por cuatro aeronaves en total.
La llegada de los ERJ-140LR se da en el marco del proyecto designado “Incorporación de SEIS (6) Aeronaves de Transporte Mediano de Mediano Alcance para incrementar la Capacidad de Transporte y Abastecimiento Aéreo en la I Brigada Aérea”. Tal como informamos hace unos días, la compra de seis Embraer ERJ145 LR obedece a “…la necesidad de satisfacer la capacidad de traslado de personal militar para responder a los requerimientos del Instrumento Militar de la Nación (IMN) tanto en tiempo de paz como en tiempo de guerra, la cual en la actualidad es insuficiente…”.
Llamativamente, el Informe de Calificación Técnica elevado para este proyecto menciona que la solución ERJ 145 LR ofrece ventajas operativas respecto a los Boeing 737-700 “QC”, aeronaves que también formaron parte de un proyecto de compra de la Fuerza Aérea. “…El ERJ 145 es ideal para rutas cortas y aeropuertos pequeños, con capacidad para operar en pistas más cortas, abriendo acceso a destinos inaccesibles para aeronaves más grandes. Su flexibilidad en redes regionales beneficia servicios a destinos menos atendidos…”.
Operaciones especiales
La modernización del material del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) es uno de los proyectos que desde Zona Militar hemos seguido particular atención, no solo por el impacto directo que tiene en la mencionada unidad, sino también por los alcances que tiene la iniciativa en el marco general de la comunidad de operaciones especiales de las FFAA nacionales.
Tal como informamos en contadas ocasiones, la adquisición de armamento y material para el GOE mantuvo lineamientos con los trabajos realizados en unidades especiales de la Infantería de Marina y del Ejército Argentino. Uno de los principales objetivos apuntó hacia la estandarización del material, el cual puede contar con algunas particularidades propias de la unidad o Fuerza, pero que sin duda garantizará la interoperabilidad entre los elementos de Operaciones Especiales.
Bajo estos lineamientos, el Grupo de Operaciones Especiales incorporó y continuará sumando material de diverso tipo, ya sea armamento, equipo de protección, entre otros. En lo que refiere a la modernización del armamento, la unidad incorporó fusiles Daniel Defense Mk18 RIS III y M4A1 RIS III (con miras de punto rojo Trijicon MRO HD ), fusiles para tirador especial Daniel Defense DELTA 5 PRO (con miras Leupold Mark 5HD 3.6-18X44 M5C3 FFP PR1-MIL) y ametralladoras ligeras OOW249P.
El proyecto inicial no solo contempló el apartado de armamento con la adquisición de pistola GLOCK 17 Gen5, ametralladoras de apoyo tipo M60E6 7,62x51mm, fusiles para tirador selecto tipo DD5V4 7,62x51mm, fusiles anti-material, lanzagranadas de 40mm tipo M203, sino que también incluyó diversos accesorios (supresores, iluminadores), equipo de protección individual, etc.
Desde que el material fue recibido por el GOE, la unidad y el proveedor han mantenido capacitaciones locales y en el exterior a los fines de afinar todo los aspectos concernientes a los sistemas en servicio.
Helicópteros
Anunciado oportunamente por quien fuera el Jefe de Estado Mayor de la FAA, Brigadier General Xavier Isaac, los esfuerzos para el 2024 apuntarían a consolidar sus medios de ala rotatoria, tanto con la modernización de sistemas en servicio así como la incorporación de nuevas capacidades. En este último caso, el proceso ya se inició con la llegada del primer Bell 407GXi.
En el apartado de modernización se encuentran los Hughes H-500D de la VII Brigada Aérea, helicópteros para los cuales se puso en marcha el proyecto denominado “Estandarizacion, Modernización y Remoción de Obsolescencias de la Cabina del Sistema de Armas Hughes 500D”. Conforme a lo detallado por el JEMGFAA hace varios meses, la iniciativa incluiría la digitalización de la aviónica, la cual será realizada íntegramente por personal de los Grupos Técnicos de las Áreas de Material Rio Cuarto (ARMACUAR) y Quilmes (AMQ).
Para el año en curso también se espera que se sostenga el impulso logrado para la flota de SA-315B Lama, helicópteros de alta montaña de la IV Brigada Aérea que recibieron en los últimos meses una importante bocanada de aire fresco con la adquisición de repuestos, componentes, así como la contratación de servicios de mantenimiento. El JEMGFAA Isaac también supo detallar que la intención sobre los Lama es realizar una modernización de la cabina, lo que permite deducir que se espera que las aeronaves dispongan de un horizonte de vida útil considerable.
La FAA también avanzó con la intención de incrementar la flota de Bell 212/UH-1N, para lo cual elevó una Carta de Solicitud (LOR) al gobierno de los EE.UU. por helicópteros UH-1N. Hace unos meses se estaba aguardando la respuesta formal para evaluar los pasos a seguir. En caso afirmativo, EE.UU. podría poner a disposición sus UH-1N dados de baja por los Marines (almacenados en el AMARG) o los que vaya pasando a retiro la USAF, aeronaves en proceso de ser reemplazados por los MH-139A Grey Wolf.
En cuanto a los helicópteros rusos Mil Mi-171E fuera de servicio, en los últimos meses circularon diversas versiones sobre su futuro, todas relacionadas a una posible cesión a Ucrania. Sin embargo, oficialmente no trascendieron mayores detalles. Vale recordar que los helicópteros no operan desde hace varios años, situación que se intentó remediar con la contratación del servicio de mantenimiento y overhaul. La iniciativa finalmente sería descartada por la Fuerza Aérea, al verse obligada a dejar sin efecto el contrato firmado con Kosmo Technopromexport atento las sanciones impuestas por occidente tras la invasión de Crimea, situación que se agravó con la invasión de febrero del 2022.
Ante la necesidad de contar con la capacidad de transporte pesado, la Fuerza Aérea Argentina evaluó diversas opciones, entre ellas la incorporación de helicópteros CH-47D Chinook y CH-46E Sea Knight. En este último caso, estuvo previsto que una comisión de la FAA viajara a los EE.UU. a los fines de evaluar el material y su respectiva documentación. De no presentarse novedades, y si los helicópteros presentan una opción favorable para la Fuerza, la opción sería avanzar en una siguiente fase.