En el primer semestre de 2019, la liquidación de agro dólares fue la menor de los últimos cinco años, a pesar de la cosecha récord. Así lo confirman los datos que dio a conocer la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), las entidades que cuentan por el 41% de todas las exportaciones argentinas.
Entre enero y junio de este año se liquidaron u$s 10.718 millones, por debajo de los u$s 11.568 millones de 2018 y muy lejos del pico más alto que fue en 2016 con u$s 13.123 millones. La liquidación fue incluso más baja que en 2015, cuando fue de u$s 10.942 millones.
Es una señal negativa que se suma a la continuada salida de capitales: en mayo llegó a u$s 2.496 millones. El dato surge del último informe mensual de Mercado de Cambio del Banco Central: la diferencia entre los ingresos totales de divisas (u$s 5.553 millones), y la «Formación de activos en el exterior de los sectores privados no financieros», que superaron los u$s 8.049 millones.
Esto sucede mientras el tipo de cambio se ha mantenido estable, o en ligero descenso, por casi dos meses. Y cuando se espera que el nuevo «hombre fuerte» del FMI, David Lipton, seguirá la política de los EE.UU. de ayudar a la «paz cambiaria» del gobierno de Macri. Además, en el plano práctico, Hacienda sigue con las licitaciones por u$s 60 millones que lleva adelante todos los días.
En AgendAR usualmente no ubicamos las noticias financieras en la sección Producción Nacional. Pero éstas reflejan el estado de ánimo de los productores, así como de los inversores: parece que no se fijan tanto en las reservas ni en las encuestas electorales, y sí en el estado general de actividad productiva, acosada por la falta de crédito y los intereses altísimos que deben pagar los que están endeudados. Tienen razón.