En el discurso del presidente Alberto Fernández en el que anunció la extensión de la cuarentena, hizo referencia a que había estado en contacto con empresarios del sector automotor para su colaboración en la lucha contra esta pandemia. El periodista Horacio Alonso cuenta la historia detrás de la mención.
«En la película Apollo 13, que protagoniza Tom Hanks, se vive un momento crítico cuando los astronautas necesitan adaptar el filtro del módulo de mando para que el sistema de eliminación de dióxido de carbono funcione en el módulo lunar. De lo contrario morirían intoxicados por su propia respiración. En Houston, a miles de kilómetros de distancia, el jefe de la misión reúne en una sala a una veintena de técnicos y especialistas y, sobre una gran mesa, arroja todos los elementos que los tres tripulantes de la nave podrían utilizar para repararlo. Cables, tubos, plásticos y demás objetos. “Señores – dice el comandante-, con todas estas piezas tienen que encontrar una solución.”
Algo parecido está sucediendo hoy en la Argentina ante la crisis por el coronavirus. El viernes pasado, desde la secretaría de Industria, comenzaron a contactar a empresas dedicadas a la producción de bienes intermedios. Concretamente, uno de los sectores consultados fue el de los fabricantes de autopartes agrupados en AFAC, entidad que se puso a disposición. El requerimiento tenía por objetivo saber la disponibilidad de espacio ocioso en las plantas y personal disponibles para que, en caso de un agravamiento de la situación, se pudiera utilizar para la fabricación de respiradores artificiales y productos que puedan requerirse para la atención de personas contagiadas. No se descartan barbijos o alcohol en gel.
Se habló específicamente de respiradores y componentes para armarlos. Muchas de las piezas para estos equipos son importadas y la posibilidad de traerla del exterior en las actuales condiciones son difíciles. La idea sería poder adaptar piezas que ya se fabrican en el país para tal fin o desarrollarse rápidamente. “Será cuestión de arreglarnos con lo que tenemos en el país” agregó el empresario. Paralelamente, también terminales automotrices locales están colaborando con el Gobierno. Un fabricante de respiradores radicado en Córdoba tiene un cuello de botella para incrementar la producción por la falta de una válvula importada de EE.UU. Se están haciendo gestiones, a través de Toyota, para reemplazarla por un proveedor japonés. Desde el Gobierno dejaron trascender que también esta automotriz podría comenzar a fabricar un tipo de respiradores de atención primaria en su planta de Zárate de donde salen las pickups Hilux. Esto está en una etapa incipiente en conjunto con la autopartista Mirgor, fabricante de aires acondicionados y stereos para los autos. Se utilizarían componentes electrónicos para adaptarlos a dos prototipos de respiradores que tienen la patente liberada.
Esta idea de utilizar a industrias del sector automotor para la producción de este tipo de aparatos ya se está utilizando en países como Estados Unidos, Italia e Inglaterra. Los gobiernos están avanzando con marcas como Ford, General Motors, Fiat Chrysler, Ferrari, Tesla, Jaguar, Land Rover y Rolls Royce con ese propósito y dedicar su capacidad productiva a colaborar con la emergencia sanitaria.
Desde otra automotrices reconocieron que ya están analizando por iniciativa propia las posibilidades de colaborar con las empresas locales dedicadas a la producción de insumos o equipos que demande la actual crisis sanitaria. “Nuestra casa matriz ya está colaborando con fabricantes de equipos para avanzar en un aumento de la producción. Nosotros estamos adelantándonos en la Argentina a ese esquema suponiendo que nos puede ser requerido”, aseguraron desde una terminal. En otra terminal confirmaron que están en “etapa exploratoria” con estas empresas especializadas para colaborar en todo lo posible y aprovechar la experiencia externa.
La situación de emergencia obliga a utilizar todos los recursos para superarla. En la película Apollo 13 –y en la realidad- los técnicos de la NASA lograron con esas pocas piezas solucionar el problema y los tripulantes de la nave pudieron regresar sanos y salvos.»