A Bolsonaro le pegan de todos lados. Pero hay quiénes lo defienden

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se ha convertido para la mayoría de la opinión pública mundial, y una buena porción de la de su propio país, en el símbolo de todo lo que está mal en el manejo de esta pandemia. Y motivos hay. Hoy publicamos algo de The Guardian donde de lo califica, y aquí reproducimos esta nota reciente de La Nación -un medio al que ni siquiera su canciller podría acusar de «marxista cultural»- y agregamos alguna información al final.

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«RÍO DE JANEIRO.- Epicentro del brote en América Latina, Brasil superó las 10.000 muertes por coronavirus , tras haber sumado 730 en 24 horas, y los casos se siguieron multiplicando en todo el país hasta alcanzar los 155.959. En tanto, el Congreso declaró tres días de duelo por los fallecidos por el Covid-19.

El decreto legislativo que prevé el duelo se publicó en una edición extraordinaria de la Gaceta Oficial del Congreso Nacional, donde los presidentes de Diputados y del Senado pidieron mantener las recomendaciones de las autoridades de la Salud, a contramano del negacionismo del presidente Jair Bolsonaro .

«Es una tragedia que nos devasta más cada día. Este Parlamento, que representa al pueblo y al equilibrio federativo de esta nación, no es indiferente a este momento de pérdida, tristeza y dolor. La situación que estamos viviendo es lamentablemente única «, dice el texto.

Frente a esta situación crítica, el papa Francisco llamó por teléfono al cardenal Odilo Pedro Scherer, arzobispo de San Pablo, el estado más afectado por la pandemia, a quien le expresó su preocupación por el número de pacientes y la pérdida de vidas humanas.

«Expresó su cercanía y solidaridad con toda la población de San Pablo y dijo que rezaba por nosotros. Finalmente, pidió transmitir su bendición apostólica a todos y también se recomendó a nuestras oraciones por él», dijo Scherer.»

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Las cifras de la nota de arriba, lamentablemente, han quedado desactualizadas. A la fecha, los casos de contagio registrados alcanzan a 162.699, y las muertes a 11.123. Pero un sector de sus partidarios resuena con la arrogancia de Bolsonaro, como se puede ver en ese video tomado con un celular «O medo mata + que o virus«.

Si no fuese por la tragedia de las muertes de inocentes, tal vez podría decirse que en Brasil se está llevando adelante un experimento epidemiológico. Pero sería también un error. En Perú y en Ecuador el nuevo coronavirus avanza desatado. Lo que sucede con los partidarios de Bolsonaro, sí se puede considerar un experimento sociológico. Veremos cómo termina.