Rusia anuncia que exportará su vacuna en noviembre

Kirill Dmitriev, director del Fondo Soberano de Inversión de Rusia, la institución que financió el desarrollo de la vacuna en su país, hizo ayer jueves varios anuncios impactantes en una conferencia de prensa virtual en la que participaron medios de todo el mundo.

  • «La semana que viene Rusia pondrá en marcha una prueba de su vacuna que alcanzará a unas 40.000 personas. «En septiembre empezará la vacunación masiva en nuestro país, y entre noviembre y diciembre podremos exportarla»
  • La vacuna rusa implica dos dosis aplicadas con 21 días de diferencia.
  • «El adenovirus humano en que se basa nuestra vacuna dio una respuesta muy fuerte en estudios históricos, mientras que el de chimpancé (usado en la vacuna de Oxford) no sabemos si tiene efectos colaterales que puedan ser cancerígenos o afectar la fertilidad».
  • «Hay una guerra informativa contra nuestro país. Les pedimos que no politicen el desarrollo de la vacuna (contra el coronavirus) porque cuantas más tengamos en el mundo, mejor será para toda la humanidad».

Repasamos algunos hechos que AgendAR publicó hace 10 días, en ocasión del anuncio del presidente Putin, y otros mencionados en esta conferencia de prensa:

El 11 de agosto se informó que Rusia había desarrollado la primera vacuna contra el coronavirus. Y que la fórmula había sido bautizada «Sputnik V», como el satélite soviético que llegó antes que cualquier intento estadounidense al espacio en plena Guerra Fría.

Apenas se produjo ese anuncio, autoridades sanitarias de distintos países y bloques regionales del mundo -y también la Organización Mundial de la Salud-, advirtieron que Rusia no había llevado a cabo la fase 3 de los ensayos previstos para el desarrollo de vacunas: es la instancia que implica probarla en una muestra masiva de personas

Kirill Dmitriev afirmó: «No hay una fase 3 en la ley rusa. Desde un punto de vista legal, se trata de estudios que se realizan después de que se registrase la vacuna», en referencia a la prueba masiva que empezará la semana que viene, y aseguró que podía considerarse «equivalente a la fase 3». La semana próxima empezará también la vacunación voluntaria a grupos de riesgo, entre los que se cuentan los trabajadores de la salud y de la educación.

Brasil, Cuba, India y Corea del Norte son países que, según Dmitriev cuentan con la capacidad necesaria para producir la vacuna. A la vez, Emiratos Árabes Unidos, Filipinas y Arabia Saudita podrían ser sedes de las pruebas clínicas, y podrían sumarse también Brasil e India.

Denis Logunov, director científico del Instituto de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, la entidad estatal que encabeza el desarrollo de la vacuna, sostuvo en la conferencia de prensa, que un decreto del gobierno permite empezar a aplicar las vacunas a los grupos de riesgo mientras se avanzan las pruebas en una cantidad representativa de personas.

«Primero probamos la vacuna en animales, entre los que hubo dos grupos de primates, y encontramos alto nivel de seguridad. También vimos la actividad defensiva de la fórmula: los primates resultaron protegidos. Cuando lo aplicamos a personas vimos que los efectos colaterales eran un poco de dolor de cabeza y dolor en el lugar de la aplicación», describió Logunov.

«El trabajo con adenovirus se perfeccionó mucho en los últimos años. Los ensayos que están más avanzados para vacuna contra el coronavirus trabajan con adenovirus, que duele tener gran eficacia para dar respuestas, y sin peligros», destacó Alexander Gintsburg, director del Instituto Gamaleya. La vacuna en la que trabaja Rusia usa adenovirus humano, mientras que la de la Universidad de Oxford y el laboratorio AstraZeneca, que se producirá en la Argentina, apela a adenovirus de chimpancé.

Dmitriev también sostuvo que la aplicación de dos dosis puede resultar más eficiente que dar una sola en términos del largo plazo de la inmunidad. Para dar cuenta de esto, citó resultados no de la vacuna rusa sino de AstraZeneca: «Quienes recibieron una segunda dosis desarrollaron una inmunidad cuatro veces más alta que quienes sólo recibieron la primera».

La iniciativa rusa, en el sitio web de la vacuna Sputnik, hace hincapié ahora en la mayor seguridad del uso de adenovirus humano respecto del obtenido de chimpancés. Según se consigna allí, el humano lleva 17 años usándose en estudios a gran escala y sirvió para desarrollar tres vacunas contra el ébola, a la vez que se usó para 2 tratamientos oncológicos, mientras que el de chimpancé no se habría utilizado para ninguna de estas tareas.

Llama la atención que ese mismo sitio destaca que hay cuatro estudios clínicos basados en el uso de adenovirus humano que ya completaron la fase 3, mientras que ninguno de los que usa adenovirus de chimpancé ya completó esa instancia. La fase 3 que el mundo -y la OMS- le reclaman a la vacuna rusa y que, según advierte la autoridad que decidió invertir en el proyecto, no está indicada por la ley de su país.

La Organización Mundial de la Salud se ha mostrado reservada ante las afirmaicones rusas. La OMS señaló que actualmente hay más de 100 vacunas potenciales contra covid-19 que se están desarrollando alrededor del mundo. La opinión compartida por la mayoría de los expertos es que hasta mediados del 2021 no se podrá contar con una vacuna disponible en el mundo. Y aún no se acepta que la vacuna rusa se haya adelantado todos esos meses en el hallazgo.

«Entre tener la idea de que quizás una vacuna posiblemente funciona, y haber pasado por todas las etapas de investigación, hay una gran diferencia», dijo el vocero de la OMS, Christian Lindmeier.

Rusia no ha publicado ningún estudio o dato científico sobre las pruebas que realizó y tampoco se conocen detalles sobre las fases del proceso que generalmente deben cumplirse antes de aprobar y lanzarse al mercado una vacuna.

Desde AgendAR debemos señalar que en la comunidad científica rusa no existe la tradición de publicar profusamente. Incluso, pocos de sus investigadores más destacados enseñan en sus universidades.

De todos modos, si hubo rivalidad entre potencias para ser la primera en poner un hombre en órbita y para llegar a la Luna ¿no la iba a haber en tener la primera vacuna contra esta pandemia? Lo bueno del asunto es que muy pocos meses tendremos más certezas.

 

VIAClarin