La relación de precios soja/maíz se ubica en 1,63/1. Se trata de una ecuación netamente favorable al cereal, que hoy ofrece más rentabilidad en la zona núcleo -la mayor parte de las provincias de Buenos Aires y Santa Fe más el sur de Córdoba- que la oleaginosa.
En las últimas semanas el precio de la soja disponible fue escalando posiciones hasta llegar muy cerca de los 250 dólares por tonelada. Y como los productores no venden en un mercado en suba, a partir de ahora el volumen de oferta de soja disponible tenderá a disminuir en las próximas semanas.
Esto es lo que ha venido sucediendo en el último mes. Los productores vendieron 652 mil toneladas de soja disponible en la semana del 15 al 22 de julio, luego comercializaron 623 mil toneladas en la semana posterior, 452 mil toneladas en la siguiente y 424 mil toneladas entre el 5 y el 12 de agosto.
A pesar de esa mejora en el precio futuro, la relación de precios soja/maíz se ubica en 1,63/1. Se trata de una ecuación netamente favorable al maíz, en cuanto al mejor margen bruto comparado entre los dos cultivos.
Hoy en zona núcleo es más rentable sembrar maíz que soja. Si a ello se le agrega la estabilidad en los rendimientos que se ha logrado la genética del cereal y la mayor seguridad de cosecha, la soja pasa a ser un cultivo de alto riesgo desde el punto de vista climático y de precios de mercado.
En el mismo sentido habrá que analizar qué cultivo tiene mejor margen en zonas extra pampeanas, con un maíz que rinde 9.000 kilos por hectárea y una soja que aporta 3.000 kilos por hectárea.
El análisis del mercado físico indica que hoy el productor tiene en su poder maíz por un volumen de 9,3 millones de toneladas. Sin embargo, las necesidades de compras de maíz por parte de la exportación y la industria hasta el fin del año comercial ascienden a 10,3 millones de toneladas.
La cuenta es muy simple: falta un millón de toneladas si la exportación quiere cumplir con el saldo exportable y si la industria pretende satisfacer la demanda interna.